Pequeñas Historias Pequeñas Historias | Page 6

Pequeñas historias

4

Hace muchos años, una preciosa criatura tuvo la suerte de ser adoptada, por una gran persona, esta se dedico en cuerpo y alma a proteger y cuidar de ella, entre los des nació un gran afecto al principio, y según fue pasando el tiempo este afecto se fue transformando en un cariño muy importante y al final termino siendo una devoción mutua la que sentían el uno por el otro. Esta persona estaba muy orgullosa de tener a su cuidado a esta criatura. Con el tiempo esta extraordinaria persona vuelve a adoptar, esta vez también es una bellísima criatura, y entre los tres surge una gran ternura, se quieren muchísimo, es un espectáculo ver como se divierten entre ellos.

Pasado algún tiempo una de estas dos criaturas enferma, su protectora no se da cuenta de que el fin está cerca y quiere seguir protegiéndola creyendo que esto era lo mejor para ella.

Por fin esta grandiosa persona ve con claridad que no se puede mantener por más tiempo el sufrimiento de esta criatura y con un admirable dolor, pero con impresionante valentía da por terminada la angustia de seguir padeciendo.

Lupo era excelente, ahora ya no está contigo, pero te queda Cuquina, sique protegiéndola, estas criaturas se lo merecen, tú la salvaguardas pero ella teda tanto…

Un abrazo de quien mucho te quiere.

Soy Paquita, la sexta de diez hermanos, nacida en Guardo y hasta los 14 años permanecí en Guardo con muy pocas posibilidades de asistir al colegio, pues necesitaba trabajar y estuve cuidando niños, a partir de los 14 años estuve en Bilbao trabajando como empleada del hogar, hasta cumplir los 20 años en este momento regrese a Guardo y a los 21 años me casé y viví fuera de Guardo durante varios años para regresar a este pueblo y permanecer en él hasta

la presente inclusive.