Pequeñas Historias
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Historia de un Caballo
Hace ya mucho tiempo que ocurrió esta en un pueblo llamado Guardo, al norte de la montaña palentina.
Una yegua apunto de parir se apartaba del grupo de una manada de caballos salvajes y mientras un halcón en pocos segundos abate a su presa, la cansada yegua trae al mundo un potrillo con una franja blanca en la frente pronto se levanta para caerse de nuevo junto a su madre que cariñosamente le lame, los peligros acechan constantemente al potrillo y a su manada: lobos, serpientes y otras alimañas, pero siempre hay un garañón cerril señalando con sus orejas la presencia de los posibles depredadores. Ha pasado mucho tiempo y entre claros y arroyos, verdes pastos y algunas tormentas, el potrillo se ha convertido en un hermoso ejemplar, ágil y libre como el viento. Pero un oscuro amanecer los caballos corren en estampida, un hombre con su corcel se dispone a perseguirles con un lazo y en un contraluz, rojo como el fuego, lanza con soltura el lazo contra nuestro garañón y este se abate con sus casco desesperado para romper la soga que asida tien al cuello ¡vamos quieto! Luchas y forcejeos dan con el furioso animal con las curdas atadas a sus patas, contra el suelo .Es muy indómito pero el hombre consigue domarle y montarlo. Mucho me costo pero ya sabía yo que acabaríamos siendo buenos amigos. Así después de domado el noble animal paso por diversos amos y por fin fue vendido a un rejoneador el cual vio a primera vista la cantidad de posibilidades que tenia aquel caballo y empezó a hacer planes para un inmediato futuro. Lo primero era conocerse los dos afondo pronto entro en contacto con el mundo de los toros comenzó primero con becerras después fueron llegando los toros, antes de que comenzaran las corridas en serio caballo y torero estaban perfectamente compenetrados listos para salir en cartel.La primera vez que vi aquel caballo le descargaban de un camión para torear las fiestas de S.antonio en guardo, ami no me dejo mi padre entrar en la plaza para ver los toros pero yo me las arregle para verlo todo desde el exterior por un agujero mas cuando la faena ya estaba casi concluida en un pequeño desliz, hiere de gravedad el toro al caballo derribando al jinete contra el suelo por fortuna salio al quite un torero de la cuadrilla del rejoneador este se incorporo y se dirijió hacia el animal que yacía maltrecho yo sentí un escalafrío Qormi cuerpo y deje de mirar aquella escena que aun recuerdo.¡no sabes cuanto lo siento pero esto no tiene remedio¡ quizás yo pueda salvarle con un poco de tiempo y de paciencia para el rejoneador la mejor forma de despedirse de su amigo y compañero era no hacerle sufrir : y la mejor forma estaba muy clara inténtelo y quédese con el así no acabara en otras manos.
El rejoneador dio por casi muerto al caballo y se marcho con la duda segura de que el labrador al que se le había dado jamás podría curarlo, pero este que sabia lo suyo de animales y algo de caballos empezó a pasearlo a diario, le fue curando las heridas y le dejó pastar en los verdes y hermosos prados, pero eso si siempre le dejaba con una cuerda larga atada al cuello.Al cabo de cierto tiempo casi recuperado el caballo su dueño le puso ha hacer las faenas mas duras del campo y cuando llego la trilla del grano fue uncido con un asno para esta labor. Había pasado por todo en esta zarzosa vida; pero esto último era para un caballo de su clase humillante. Así que cambio de actitud y siguió dando vueltas a la era con aquel burro