Antes de la implementación del Programa de Formación Complementaria para Maestras y Maestros en Ejercicio (PROFOCOM), entre algunos docentes, que habían cursado las licenciaturas especiales habilitadas para maestros en las universidades, la forma de presentación recurría a una frase sugestiva: “soy maestro normalista y además licenciado en…”1 . En la actualidad, la gran mayoría de maestros en servicio ya tienen el grado de licenciatura, o bien ya desde su formación inicial o mediante los programas de formación que efectúa el PROFOCOM.
Quizás dicha expresión del pasado reciente: “soy maestro normalista y además licenciado en…”, era una forma común de presentación, o, en todo caso, una nueva manera en que los docentes de ese entonces consideran su “estatus profesional”. Una reflexión más profunda me lleva a sugerir que se trata de un indicio que encubre, y al mismo tiempo exhibe, los cambios producidos en la constitución y auto-identificación docente, de maestro normalista a licenciado.
Pero esta nueva constitución y autoidentificación considero que compromete a sujetos, en este caso los maestros, quienes asumen, implícita o explícitamente, que viven procesos de cambio en su manera de resignificar su propia identidad docente. Para entender de mejor manera esta apropiación, nos servimos de la categoría de “invenciones de la docencia”, desarrollado por Silvia Finocchio, que nos permite considerar las significaciones otorgadas por los docentes al espacio de la docencia.
"soy maestro normalista y además licenciado en…”
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Daniel Pedro Tirado Ramírez
¿El maestro licenciado? Evidencias para sugerir el repliegue de la histórica identidad normalista del docente
Julio 2019, Número 01
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