Pablo Cazau
Es posible que B causara a en los casos 1 y 3, y que D causara a en el
caso 2. Debido a que esta posibilidad existe, solo se puede concluir que
es probable que A sea la causa de a.
En general, Stuart Mill estableció la limitación de sus métodos en su
carácter inductivo. En efecto, Para él,
la lógica debe estudiar principalmente la teoría de la inducción
como el único método adecuado para las ciencias. Los conocimientos científicos son producto de la inducción, pues las mismas
generalidades ideales que se suponen adquiridas “a priori” son
el resultado de generalizaciones inductivas. La previsión de los fenómenos tiene, por tanto, un carácter probable [que] no es nunca
seguridad definitiva. (Ferrater, 1979, pp. 2227-2228)
Cabe recordar aquí que la inducción es un razonamiento cuya conclusión es probable, es decir, las premisas no alcanzan para tornarla necesaria (lo que sería el caso de la deducción).
4. Reivindicación de los métodos de Mill. Copi (1974) cuestiona los mé-
todos de Mill como instancias de descubrimiento y de prueba, pero los
reivindica diciendo que, si se agrega una hipótesis adicional que postule
un universo finito de causas, pueden obtenerse conclusiones seguras o
necesarias, es decir, fundadas en la deducción y no en la inducción (los
métodos de Mill son esencialmente inductivos). En el ejemplo del problema de aprendizaje, si se agrega como premisa adicional que las “únicas” causas posibles del problema de aprendizaje X son A, B y C, entonces
la conclusión de que C es la causa efectiva es necesaria.
Así presentados, los métodos de Mill “aparecen como instrumentos
para someter a ensayo la hipótesis. Sus enunciados describen el método
del ‘experimento controlado’, que constituye un arma indispensable de la
ciencia moderna” (Copi, 1974, p. 461). Copi (1974) redondea su reivindicación señalando que, si bien las leyes causales nunca pueden ser descubiertas con los métodos de Mill, ni pueden estos establecer demostrativamente
88 | Paradigmas, jul.-dic., 2013, Vol. 5, No. 2, 69-98