Paradigmas Vol. 3, No. 1 | Page 41

Ética de la responsabilidad

« Ética de la responsabilidad ». Max Weber

Friedrich Nietzsche desarrolla el concepto responsabilidad en la forma como se define en la modernidad. Sin embargo, corresponde a Max Weber( quizás el sociólogo más importante de los clásicos del pensamiento social moderno) introducir la expresión ética de la responsabilidad. Continuando con la obra de Nietzsche, Weber( 1984) define la responsabilidad desde la teoría de la acción social, entendida ésta última en términos de la conducta individual.
En esa dirección, para Weber la responsabilidad solamente puede ser comprendida desde el sujeto como único responsable de sus acciones y decisiones sociales. El concepto de responsabilidad está interrelacionado a la acción individual. Sentido que va tener vigencia hasta la primera mitad del siglo xx, cuando se modifica su contenido y la responsabilidad pasa a ser entendida como responsabilidad social o responsabilidad global.
Weber desarrolla la ética de la responsabilidad en sus trabajos La política como vocación y La ciencia como vocación, las cuales fueron dos conferencias pronunciadas en la Asociación Libre de Estudiantes de Múnich en el invierno de 1919. Es importante resaltar que el concepto de ética de la responsabilidad es producto del impacto que causó la Primera Guerra Mundial en la conciencia de Weber y de los intelectuales europeos( la guerra terminó el 11 de noviembre de 1918). En esas conferencias se proponen tres tipos de ética política: a. La ética de la convicción. Las decisiones de la acción se rigen exclusivamente por valores absolutos, pudiendo ser religiosos o políticos y no se toman en cuenta los resultados de las acciones del individuo. Interesa que los valores se realicen, pase lo que pase con las consecuencias de las decisiones de las personas. Los valores a priori, antes de la acción, se imponen al individuo, quién busca implementarlos sin tener en cuenta sus efectos en la sociedad. Se trata de una racionalidad dogmática. La conducta de las personas se encuentra definida únicamente por la obligación moral y la intransigencia absoluta al servicio de los principios. b. La ética del poder por el poder( 1997). Aunque en el texto no aparece explícitamente, se desprende de la conducta del individuo que sólo « vive‘ de’ la política »( 1997, p. 95). Es lo contrario a la ética de la convicción; así, no

Paradigmas, ene.-jun., 2011, Vol. 3, No. 1, 33-48 | 39