entre
BASTIDORES
VESTUARIO · LOCALIZACIONES · DECORADOS · MÚSICA
Una parte importante de la producción de la serie recayó en tres personas que fueron indis-
pensables para poder recrear el ambiente que Diana Gabaldon describió en su novela: Terry
Dresbach, Jon Gary Steele y Bear McCreary. Cada uno se encargó de tres partes fundamen-
tales de la producción: vestuario, localizaciones y decorados y la música.
L
VESTUARIO
a diseñadora de ves-
tuario Terry Dres-
bach, cuya pasión y
adoración por “Outlander”
es anterior a la adaptación
televisiva, es fan incondi-
cional de los libros de
Diana Gabaldón. Pero la
idea de adaptar los libros
para televisión cruzó por
su mente y se lo hizo
saber a su reciente ma-
rido, Ron Moore, a princi-
pios del año 2000:
"Necesitas convertir este
libro en una película o
algo así", le comentó por
aquel entonces, pero se
quedó en eso, un simple
comentario. En 2005, la
diseñadora ganadora de
un premio Emmy se retiró
a vivir al campo para criar
y cuidar a su familia. Sus
pensamientos de una
serie sobre “Outlander” se
iban desvaneciendo hasta
la inolvidable cena casi
una década después que
celebró el matrimonio
junto a la socia de éste,
Maril Davis, y donde se
discutió el tema de la no-
vela como material viable
de una adaptación.
Una vez embarcados en
este ambicioso proyecto,
Ron pidió a su mujer que
se uniera al equipo y fuera
la responsable de crear el
vestuario para la serie. En
un primer momento, Terry
rechazó la oferta. Había
estado retirada de la pro-
12 OUTLANDER MAGAZINE
fesión más de diez años y
no se veía segura para
hacerlo. Fue semanas
después cuando final-
mente accedió al observar
que ningún otro diseñador
quería hacerlo por la gran
magnitud del trabajo en-
comendado.
Terry comenzó su trabajo
pensando en diseñarlo
exactamente como Diana
lo escribió, pero no fun-
cionó. Escritora y diseña-
dora hablaron largamente
del tema, puedes escribir
lo que quieras y como
quieras, luego los lectores
componen mentalmente
sus propias ideas en su
cabeza. Después volvió a
su tablero de dibujo con la
idea de mantener la no-
vela como máxima inspi-
ración.
Dresbach, una vez que
aterrizó en Escocia, tuvo
un total de siete semanas
de preparación antes de
que comenzara el rodaje.
Ella y Jon Gary Steele lle-
garon a un edificio vacío
que tendrían que convertir
en su centro creativo, par-
tiendo desde cero: "No
había máquinas de coser;
No había teléfonos. No
había perchas; No había
nada", recuerda Terry.
“Para la primera tempo-
rada alquilamos todo lo
que podíamos conseguir,
pero no era mucho y es-
taba en muy mal estado.
Había que crear muchísi-
mos trajes en poco
tiempo. Comenzamos a
buscar personas para el
equipo de vestuario. Te-
níamos un presupuesto
para ocho personas. Al
final, teníamos a veinti-
cinco o treinta trabajado-
res en los talleres de
costura”.
En términos de precisión
histórica, Terry, realizó
una completa investiga-
ción: "Hay muy poca do-
cumentación sobre lo que
se usó en Escocia", ex-
plica Dresbach. "Después
de Culloden y su genoci-
dio cultural, que es lo que
sucedió con el objetivo de
Inglaterra de borrar una
cultura, quedó muy poca
información al respecto.
Ha sido duro, pero el pri-
mer día que tuvimos a
todos nuestros Highlan-
ders sobre el escenario,
Terry Dresbach.
un alboroto general reinó
en el estudio. Eso es
exactamente lo que que-
ría hacer. Cuando los
mires, quiero que sientas
Escocia. Cuando mires la
ropa de Jamie o de cual-
quiera de nuestros High-
landers, son todas las
texturas, valores, tonos y
colores que ves cada día
caminando por Escocia.
Cada uno de ellos”.
M
LOCALIZACIONES
ientras que la no-
vela original de
Diana Gabaldon
se establecía en Escocia,
no estaba claro que la fil-
mación pudiera ser allí.
Las localizaciones, como
con cualquier otra serie,
serían decididas por mu-
chos factores, incluyendo
el presupuesto, el equipo
disponible, las instalacio-