“Por lo cual, puesto que recibimos un reino que es inconmovible"
(Hebreos 12:28).
¿S
abes algo en esta tierra que
dure para siempre? Todo
en este mundo es inestable. Los edificios se desmoronan en
polvo, las empresas declaran la quiebra, nuestras casas envejecen y se
desmoronan, nuestros coches se oxidan y lo peor de todo es que nuestros
cuerpos eventualmente se desgastan. Pero el reino de Dios dura para
siempre.
Cuando el ángel Gabriel vino a María,
dijo que daría a luz a un Hijo que
"reinará sobre la casa de Jacob para
siempre, y de su reino no tendrá fin"
(Lucas 1:33).
Dios estableció un reino en la tierra
que durará para siempre. Por lo
tanto, toda la raza humana puede dividirse en dos grupos: los que deciden vivir por los valores terrenales y
los que deciden vivir según los valores del reino. La diferencia es esta: vivir por valores terrenales produce recompensas terrenales que pagan
más rápido y desaparecen más rápido; Vivir por los valores del reino
Odisea Cristiana | Diciembre 2016
produce recompensas del reino. No
suelen venir tan rápido, pero duran
para siempre. Puedes vivir para este
mundo o puedes vivir para el reino
de Dios. La decisión es tuya.
Jesús tiene un reino. Él lo está construyendo en los corazones humanos
alrededor del mundo. Algún día regresará y reinará visiblemente en la
tierra. Ese reino nunca terminará.
Hay algunos hombres y mujeres que
no son como todos los demás. Se han
apoderado del pensamiento de que
el reino de Dios es la cosa más grande
del mundo, y este cambio en su
forma de pensar ha revolucionado
sus vidas y reorientado sus valores.
Su reino nunca terminará. ¿Por qué
seguirías a alguien más?
Soberano Señor, tú eres la roca sólida bajo nuestros pies en este
mundo inestable. Confiamos en ti, y
no seremos movidos. Cuando los
reinos de esta tierra se hayan desmenuzado, tus palabras seguirán
siendo verdaderas. Amén.
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