Número 12 - Año 2 - octubre 2013 Número 12 - Año 2 - octubre 2013 | Page 37
otros jóvenes, adultos, viejitos, hay santos y hay santas, unos
flaquitos, otros gorditos, unos muy inteligentes otros muy
sencillos, algunos han nacido muy ricos otros fueron muy pobres,
unos son blancos otros negros, unos han sido santos desde
pequeños, otros llevaron una vida en la que no conocían a Dios,
y se portaron muy mal, pero cuando se encontraron con Jesús,
cambiaron, y decidieron ser felices siguiéndolo.
Todos, pero todos, estamos llamados a ser santos, Dios nos
quiere santos, y para eso nos dio el Don de la Fe, fue su regalo
cuando nos bautizaron, y todos los que estamos bautizados
tenemos que ser santos, pero también tenemos que querer
serlo. El Don de la Fe es más grande que todos los superpoderes
de tus héroes favoritos y además es de verdad. Pero la fe no es
para tener unos músculos muy fuertes, o para poder volar, o ver
a través de las paredes, ni para golpear a nadie.
Ser santos es querer seguir a Jesús, actuar como él, hacer el
bien como él, amar como él. SER SANTO ES SER AMIGO DE
JESÚS.
¿A qué Santo o santa conoces?, ¿por qué es santo? Hacer una
pequeña lista como la de los superhéroes pero de los santos
que los niños vayan nombrando. ¿en tu casa hay imágenes de
algún santo o santa? ¿sabes cómo vivió, qué hizo para ser
santo? ¿En la tele has visto que pongan a los santos?.
Vamos ahora a conocer algunos de ellos.
Hace un tiempo hubo un niño llamado Domingo
Savio, que desde muy chiquito entendió que ser
amigo de Jesús era lo más importante en la vida. El
día que hizo su primera comunión, escribió en un
papelito: "Mis amigos serán Jesús y María, me
confesaré y comulgaré los domingos y días de
fiesta, prefiero morir antes que pecar".