Llevamos tiempo pidiendo que se solucione este problema y el único remedio es que coloquen algún tipo de fosa unos metros más a la izquierda, en una esquina donde no se moleste a ningún vecino, ¡pues se huele a kilómetros el asqueroso olor de la suciedad!
No podemos vivir así. Esta parte de la calle es únicamente conocida por la suciedad y la basura que se amontona. Estas fosas, desbordadas frecuentemente por la cantidad de residuos, incluso están deteriorando la fachada.
Tiran de todo, desde mecedoras hasta restos de comida. Y las ratas andan por la noche a sus anchas.
A pesar de reclamaciones de distintos vecinos, la situación ha empeorado día tras día.
Como los ciudadanos y ciudadanas de la calle Mejía, pagamos nuestros impuestos hacia los señores feudales y a nosotros posiblemente nos cueste más ya que nuestros ingresos son, con toda seguridad, muy inferiores.
Solicitamos más vigilancia que multe a los que tiran basuras a la calle o no recojan los grandes excrementos de caballos que muchas veces llegan a nuestros hogares junto a nuestros miserables calzados.
Gracias y espero que nos lo solucionen de una vez.
-Don Juan
Nova Caeli - Cartas al director
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¡AGUA VA!