PATOLOGIA ASOCIADA AL
CONSUMO DEL TABACO.
La relación entre el tabaco y el cáncer de pulmón ha sido confirmada mediante numero-
sos estudios epidemiológicos, siendo el responsable directo del 90% de los casos. Existe
una clara asociación entre el riesgo de presentar cáncer de pulmón y el número de ciga-
rrillos que se consumen, duración del consumo, contenido de alquitrán de los cigarrillos y
exposición a asbesto y otros contaminantes. En fumadores de menos de 20 cigarrillos al
día, el riesgo relativo de desarrollar cáncer de pulmón es 18,8 veces superior al encontra-
do en no fumadores, y en los fumadores de más de 20 cigarrillos la cifra se eleva a 26,9
veces(4). Cuando se deja de fumar se produce un descenso progresivo del riesgo de ma-
nera que, a los 15 años, éste se reduce en un 80-90%. Otras enfermedades neoplásicas
frecuentes son el cáncer de laringe, cavidad oral, vejiga, riñón y esófago. También se ha
asociado a cáncer de estómago, páncreas, hígado, cervix y tumores genitales
El tabaco es el principal desencadenante de enfermedades respiratorias. La aparición de
tos y expectoración es tres veces más elevada en los fumadores. El humo del tabaco al-
tera la estructura de la vía aérea con pérdida de cilios, hiperplasia de glándulas mucosas
y metaplasia escamosa, además de destrucción de alvéolos peribronquiales, y reducción
del número de pequeñas arterias(6). Como consecuencia de esto, se produce deterioro
progresivo de la función pulmonar, pudiendo desarrollar EPOC. Sólo del 15 al 20% de los
fumadores desarrollan EPOC, lo que hace pensar que existen mecanismos intrínsecos
determinantes de esa susceptibilidad individual. Además, influyen de manera directa la
edad de inicio del consumo, el número de cigarrillos consumidos diariamente y los años
que se ha mantenido el hábito. En no fumadores la disminución anual del FEV1 no su-
pera los 30 ml al año, mientras que el fumador susceptible pierde de 40 a 100 ml al año.
El abandono del tabaco logra una disminución del riesgo de mortalidad, consiguiendo un
menor descenso del FEV1 que los que continúan fumando(7). El tabaco se asocia tam-
bién con un incremento de la hiperreactividad bronquial, los fumadores presentan mayor
vulnerabilidad para padecer infecciones del tracto respiratorio inferior. También se han
descrito un aumento
de las complica-
ciones respiratorias
post-quirúrgicas
como consecuencia
de fumar.