Estructura, políticas y comportamiento del transporte de
aplicación turística.
• Estructura administrativa (pública y privada).
• Situación del espectro artesanal folklórico (organización,
participantes, manifestaciones, etc.).
• Agrupaciones, formas de participación y relaciones entre
participantes de la actividad.
• Movimientos (hacia el exterior o al interior del país o región)
de capitales relacionados con las empresas turísticas.
Los aspectos antes citados constituyen sólo algunos de los elementos principales de un diagnóstico de carácter turístico.
FIJACIÓN DE OBJETIVOS Y METAS
Considerando las grandes líneas de la situación deseada ("imagen objetivo") y la descripción pormenorizada de la situación existente (diagnóstico), procede avanzar hacia una nueva etapa que precise con claridad los objetivos y metas cuya consecución permitirá al fenómeno o actividad en proceso de planificación, aproximarse a la situación deseada. Tanto el objetivo como la meta, muestran los aspectos fundamentales que se pretenden alcanzar mediante el proceso de planificación. No obstante, su naturaleza y jerarquía son diferentes, ya que mientras el primero no se expresa en forma cuantitativa, la segunda deberá hacerlo mediante órdenes de magnitud. Asimismo, el objetivo tiene integridad en sí mismo, mientras que la meta proviene o se desprende de aquél, teniendo por lo tanto una jerarquía menor.
La responsabilidad
La fijación de objetivos refleja la política general de desarrollo que se pretende imponer a una actividad socioeconómica (o a conjuntos de éstas). Por lo tanto, la responsabilidad en la definición de objetivos debe recaer en los círculos de decisión y poder respectivos, y no en los cuadros técnicos. Eventualmente, estos últimos pueden establecerlos a condición de contar con el aval total de las autoridades en cuestión y bajo su compromiso y revisión.