Mis ideas filosoficas 3 | Page 13

cionado. En los últimos siglos el progreso científico ha experi- mentado grandes avances, pero ese progreso tecnológico no con- tinuará indefinidamente al ritmo que tiene en la actualidad, por- que lo que llamamos progreso, es más bien un proceso de evolu- ción en el que la humanidad tiene que desarrollar aquellos poten- ciales que le corresponde tener, y cuando esto ocurra el progreso científico prácticamente terminara o se reducirá significativamen- te. Cuando se llegue a ese punto la humanidad habrá terminado su etapa esencial de evolución y en consecuencia el ritmo de cambio social y tecnológico se reducirá. Es como si se hubiera graduado en una hipotética universidad galáctica, por lo que se convertirá en un planeta adulto en el universo. Aquellos que creen que el progreso tecnológico seguirá indefinidamente al ritmo actual has- ta poder proporcionar todo aquello que podamos desear demues- tran ser profundamente ingenuos. Porque la finalidad del progreso es que el hombre se realice como ser científicamente avanzado y con una tecnología inmensa, pero limitada a su lugar en el univer- so, porque no todo es posible, el hombre podrá hacer muchas co- sas, pero solo aquellas que tengan sentido dentro de las leyes na- turales. Podría decirse que en la actualidad el hombre contemporáneo es como si tuviera un cuerpo perfecto, pero gobernado por una men- te imperfecta, el equilibrio entre ambos valores solo llegará cuan- do la humanidad termine su progreso moral, que se encuentra bas- tante más retrasado que el tecnológico. Esto es debido a que para poder progresar en el plano filosófico se necesita un cierto grado de intimidad y concentración, que en principio parece estar en contradicción con los factores necesarios para la vida, pues para poder vivir por lo general son necesarios los trabajos que se basan en las relaciones sociales y la vida extrovertida. Por ello podría decirse que solo es posible dedicarse con interés a la filosofía cuando todos los demás aspectos sociales como la atención al tra- bajo o a los hijos estén resueltos. Este problema no ocurre cuando se trata de conseguir el progreso tecnológico, porque un hombre puede vivir sin dificultades dedicado a un trabajo de investiga- ción, pero es mucho más difícil si de lo que se trata es de vivir de la filosofía. Por ello, para que el hombre pueda ser perfecto tanto en el plano material o físico, como en el plano espiritual o filosó- 13