Mictlantecuhtli número cero RevistaAntropologica2 | страница 14

el movimiento armado de 1910 fomar parte para pelear por sus derechos, a partir de estos suce- sos la fábrica de San Bruno fue tomando un peso aún mayor, sin embargo, la lucha seguía sin lograr sus objetivos, teniendo como resultado represión por parte de fuerzas federales y que los principales dirigentes fueran deportados. Después de tiempo de lucha el gobernador Adalberto Tejeda dicto en octubre de 1921 la devolución de tierras y tiempo después el 25 de octubre de 1923, el presiden- te Álvaro Obregón dio una resolución definitiva y restituyó 553 hectáreas para extender aún más la fábrica, posteriormente se empezaron a formar diversos sindicatos que ayudaron al progreso del barrio y en estas nuevas tierras también se construyeron viviendas para los trabajadores. Las cosas estaban marchando bien hasta que en 1924 ocurrió un hecho que marcó a sus habitantes y cambio el rumbo del barrio; el asesinato de los Mártires del 28 de agosto. Como en día normal y tranquilo los trabajadores estaban por finalizar sus actividades por lo que los líderes del sindicato seguían ahí cuando un grupo armado conocido como “La mano negra” llegó su- puestamente a asaltar, asesinaron a 2 integrantes en un instante y se llevaron a 6 como rehenes, los llevaron a Plan de Naranjillo donde fueron forzados a cavar sus tumbas, fueron asesinaron y finalmen- te escondieron sus cadáveres. Tiempo después se formó una comisión de sindicatos de “La fama”, “San Bruno”, zapateros y panaderos para trasladarse a donde se encontraban los mártires desapa- recidos, a pesar de amenazas decidieron buscarlos con el objetivo de encontrar en dónde estaban sepultados. Una vez encontrados los cadáveres fueron trasladados al Sindicato de San Bruno para honrarlos y posteriormente sepultarlos en el panteón 5 de febrero. Este hecho como es de imaginar toco el corazón de todos los habitantes del barrio y fue tomado como impulso para luchar aun con mas fuerza por sus derechos y mejores condiciones de vida, al paso de los años la fábrica se vio afectada por la situación económica del país por lo que poco a poco fue decayendo por lo cual paso a manos del estado, así como toda su administración. Sin embargo, los trabajadores y sus familias no dejaron de exigir sus derechos, debemos destacar el hecho de que poco a poco lograron realizar esto, con el paso de los años se logró que se les donaran terrenos para construir casas, espacios recreativos, de salud, y de educación, dando como resultado el estableci- miento del Área Humanidades de la Universidad Veracruzana, siendo las más representativa. En la actualidad los restos de esta fábrica sirven con finalidades recreativas en donde las personas van a tomar clases de boxeo, hacen partidos de fútbol, en ocasiones es ocupado para hacer sesiones fotográficas, videos musicales, como coliseo para peleas de boxeo y donde las personas pueden ha- cer ejercicio. Si bien gran parte se ha perdido lo que se ha conservado ha sido gracias a los miembros del barrio quienes siempre intentan preservar el recuerdo de la gran fábrica y de todo el camino que se ha realizado, pues es algo que les da identidad y claro voz. La historia de este sitio, su conformación, los momentos de mayor dificultad que han sido vividos y relatados deben hacernos reflexionar si algo ha cambiado, de no ser así que podríamos hacer, seguir la historia o marcar un nuevo sendero para que cuando vuélvanos a ver los retos no solo imaginemos esos miles de historias que van consigo, sino que las valoremos y las tomemos como reflexión para no luchar sino para vivir una vida mejor.