Mi primera revista sterio de Belicena Villca editorial de la cas | Page 279

¨El Misterio de Belicena Villca¨ Talmud y en diversos escritos rabínicos puede leerse, convenientemente alterada, parte de esta historia. Se menciona allí a la Torre de Nimrod “desde la cual sus arqueros disparaban flechas al Cielo”, el “orgullo luciférico” del Rey Kassita, su Torre “confundida” con la de Babel, etc. También se han hallado tablillas de arcilla grabadas en escritura cuneiforme, que cuentan más objetivamente los hechos, y numerosos Kudurros, piedras grabadas que solían colocarse en Templos o como límites territoriales, con referencias a la hazaña de Nimrod. Quizá de todas las falsificaciones hechas en torno a esta gesta hiperbórea, la más insidiosa sea la referencia de H.P. Blavatsky en la Doctrina Secreta, adonde se escribe que “una élite de sacerdotes asirio-babilónicos descubrió la manera de escapar al Plan de Evolución del Logos Solar y abandonó la Cadena Planetaria, junto con su pueblo, rumbo a las ‘estrellas’, donde continúan su evolución”. Es decir que la mencionada agente de la Sinarquía pretende capitalizar la hazaña de Nimrod en favor de las teorías sinárquicas. El resto del pueblo Kassita continuó dominando durante un tiempo pero finalmente se fundió con sus primos Hititas pues, ya se ha dicho, “una Raza que pierde sus Iniciados cainitas es una Raza moribunda” y, junto con Nimrod, habían partido para siempre la Elite de Iniciados cainitas. Sin embargo la expansión Hitita llevó a habitar nuevamente Borsippa, la cual fue en parte reconstruida, pero nadie se atrevió a tocar las ruinas de la terrible Torre. En Chang Shambalá siempre está presente la historia de Nimrod y con la consigna de evitar futuros intentos de ese tipo es que muchos “enviados” se han ocupado durante siglos de eliminar pruebas al respecto y de confundir sobre la metodología táctica empleada en el ataque. Bera y Birsa han sido dos de los Inmortales de la Fraternidad Blanca que más han trabajado en este sentido. Sin embargo varios pueblos hiperbóreos imitaron, en mayor o menor medida, la hazaña de Nimrod: uno de ellos fue el pueblo vikingo de Groenlandia, que “abrió la Puerta”, cerrada luego por Quiblón-Colón. Otro, más reciente, es el pueblo alemán del Tercer Reich que contaba con la Sabiduría Hiperbórea de la Elite de Iniciados cainitas de la Orden Negra el Führer de Alemania pudo así, con perspectivas de éxito, emprender nuevamente la mutación colectiva de la Raza e intentar la conquista del Cielo. Pero los resultados de esta nueva gesta hiperbórea seguramente aparecerán, a quienes se hallan bajo los efectos de la Magia Sinárquica, como una “derrota”. Para concluir este resumen de la historia de Nimrod diré que el Rey Kassita, su bravo General Ninurta, sus Iniciados, y todo el pueblo que murió en Borsippa, emprendieron el definitivo Regreso al Origen guiados por la indómita Princesa Isa. Mientras tanto los Demonios idiotas Hiwa Anakim devoraban sus cuerpos en Chang Shambalá y el Rey del Mundo pronunciaba su Oración vespertina, retrasada doce horas ese día por la hazaña imborrable de Nimrod. En un Museo de La Plata, en Buenos Aires, se halla el famoso Kudurru de Kashshu, descubierto en Susa, donde formaba parte del botín del Rey elomita Shutruk-Nakhunte del siglo XII A.J.C. En él está grabada la regia figura de Nimrod pisando a la Luna y al Sol, y con una estrella de ocho puntas, símbolo del planeta Venus, sobre su cabeza. A su lado, un Zigurat, recuerda a su famosa Torre. Abajo de esta imagen hay dos columnas de escritura cuneiforme en lengua Hitita adonde se menciona la muerte del Rey y se advierte que nadie debe olvidar su hazaña. Transcribiré parte de dicho texto según la erudita versión del Profesor Ramírez de la Universidad de Salta, considerada universalmente como la más exacta: La Muerte de Nimrod Desde una famosa Torre cuyas ruinas aquí están el Rey Nimrod al Cielo ha partido. ¡Un día volverá! Mas él no ha ido a los Dioses su rodilla a hincar. Con el arco tensado ha subido dispuesto a matar. Sus flechas a Shamash han herido 279