Mi primera revista sterio de Belicena Villca editorial de la cas | Page 263
¨El Misterio de Belicena Villca¨
a quien El teme
porque su Sangre es Pura
tan azul como el mar
y tan roja como el amanecer de Shamash.
Somos un pueblo valeroso como el león
y volamos alto como el águila,
pero nuestro ojo es agudo
y nuestras garras despedazan al Enemigo.
Somos un pueblo duro
que no conoce el perdón
y no da tregua en la lucha.
Nos conduce Nimrod
arquero como no hay otro en la Tierra.
Las estrellas lo dibujaron
cazando en el cielo.
Llevamos con nosotros
la Piedra Verde de Kus
para que no volvamos a perdernos
¿qué más podemos pedir?
¡Apártense, Demonios infernales!
porque hay aquí un pueblo despierto
a quien no podrán atemorizar
ni engañar jamás.
¡En guardia, Demonios malditos!
porque se ha levantado una Raza indómita
que Os presentará combate a muerte.
Hoy el camino ha llegado a su fin.
Atrás ha quedado el gran mar Kash
y el país de Kashshu;
sepultados en las rutas holladas
permanecen nuestras mujeres y niños,
nuestros ancianos y los mejores guerreros.
Muchos han caído por la gloria de Kus
y por seguir al heroico Nimrod,
el jefe que nos conducirá a la victoria
en éste o en otros cielos.
En Borsippa hemos acampado.
Para construir la Torre más alta del mundo
y domar la Serpiente de Fuego.
Como nuestro Zigurat no hay otro
ni en Babilonia ni en Assur,
ni en el lejano Egipto,
ni en la tierra de los arios.
Desde que el Diluvio cubrió la Tierra
y castigó a los Demonios
que habitaban las islas de Ruta y Daitya
no se ha visto otra Torre igual.
Los Dioses se alegran por nosotros
y los Demonios nos temen.
¡Cuánto hemos trabajado para construirlo!
Oh Isa, este esfuerzo no debe ser en vano.
La Iniciada se hallaba en el mismo sitio, parada frente a la Esmeralda de Kus, guardando
respetuoso silencio mientras sus ojos, bellamente rasgados se mantenían fijos en el
Hierofante.
Este continuó con su monólogo:
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