Mi primera revista REVISTA MILENIO TERMINADA | Page 3
Ocio y jóvenes
C
uando observamos e indagamos sobre la
vida, nos damos cuenta de muchas cosas,
pero casi nunca tomamos en cuenta lo que
hacemos en nuestro tiempo libre, en que
ocupamos esas horas realmente, si de verdad
disfrutamos ese espacio o si en realidad hacemos
cualquier cosa.
Según datos de la última encuesta realizada por
nuestros reporteros, el 76,5% de la los jóvenes de
edades comprendidas entre los 15 y 19 años
dispone de tres o más horas de tiempo libre al día
en la semana. El porcentaje de hombres que
dispone de ese tiempo durante los días hábiles es
superior al de las mujeres (79,8% frente al 74,2%).
Según los datos, sus principales actividades de ocio
son ver la televisión (49%), estar con sus amistades
o parejas (45%) y escuchar música (42%). Practicar
deporte (26%) y entretenerse con el computador en
casa (24%) se realizan con bastante frecuencia.
Durante el fin de semana cambian las prioridades de
dedicación de tiempo, salvo en el caso de las
actividades de socialización. Estar con sus
amistades y parejas (59%) es la actividad que más
jóvenes realizan durante los fines de semana,
además de ir a bares y lugares de comida rápida
(33%), a discotecas (23%), hacer deporte (22%) o
descansar (19%).
Las opiniones vertidas en los grupos de discusión
corroboran en cierta medida esta información.
Afirman que su tiempo libre lo dedican
preferentemente a actividades de socialización: salir
con los amigos, de carrete, a tomar una chela.
Incluso en la elección de prácticas consideradas
más propiamente culturales como acudir al cine o a
conciertos, priman los aspectos socializadores.
“Vamos al cine con los amigos y luego ya elegimos
la película que más nos guste entre las que están en
cartelera”. El punto discrepante con los datos de la
encuesta tiene que ver con el ver televisión y el uso
del computador. La información recogida en los
grupos relega a la TV a un papel secundario, por
detrás del uso del computador e Internet (para
conectarse a las redes sociales, descargar música,
ver vídeos y series en streaming…) escuchar
música o jugar a videojuegos, en el caso de los
varones.
Estudios recientes del ocio y del entretenimiento
digital señalan que los jóvenes son el colectivo que
muestra un mayor abandono de los hábitos
tradicionales de consumo de televisión. El público
que más está dejando de ver la televisión es el
segmento de población entre los 14 y los 25 años.
De ser uno de los principales espectadores en
décadas anteriores (hasta un 20% en 1995, por
ejemplo) han pasado a ser los que menos, por
debajo incluso del público infantil. Parece que el
tiempo que le restan a la televisión se lo dedican a
Internet.
En conclusión, de lo recogido en los grupos de
discusión, cabe destacar el énfasis que ponen en
considerar agotada la TV por dos razones: la
programación que hacen y la competencia que tiene
de los contenidos en Internet. “Internet es la cultura
al alcance de la mano y la TV es la desculturización
total”; “nos hemos acostumbrado a elegir todo a la
carta y ya no nos conformamos con lo que te
ofrecen”. Consideran la TV una pantalla de
proyección más grande; un elemento casi
únicamente decorativo y de compañía: “la pones
más como ruido de fondo para hacer compañía,
forman parte casi de las casas”; “es un fondo al que
ya casi no hago caso”.