Mi primera publicacion Revista ESOA | Page 49

HISTORIAL DE FALLAS INTEGRALES PARA UNIDADES NAVALES En resumen tenemos nuestro sistema de control, el cual recopila información que se procesa, y se puede ver en varios formatos admisibles; una vez vistos por el usuario se almacenan en unidades propias o externas, transferidas por un bus de datos. La última parte de todo este proceso, es crear un registro con fallas de estos equipos, añadiéndole además experiencias y apreciaciones del usuario. El registro de fallas es la parte central del proceso, puesto que luego de un tiempo, se poseerá abundante información referida a un equipo particular, y con ello tener una predictibilidad o posibilidad de ocurrencia de fallas, sabiendo en forma aproximada cuánto tiempo tardará entre cada una, y además obtener conclusiones, sobre acortar o ampliar los períodos entre cierto mantenimiento planificado. Con él, armaremos el historial de fallas. Un historial es una relación detallada y ordenada que se hace sobre el funcionamiento de un equipo. Para efectuarlo, basta con realizar una planilla de Excel, en la cual incorporaremos tanta información como requieran los usuarios del mismo, entre ellas: equipo y sistema principal al cual pertenece, falla ocurrida y causa, síntomas de la misma, acciones correctivas inmediatas y posteriores efectuadas, consideraciones particulares del equipo afectado. Mención especial respecto a la causa, porque es la raíz del problema, y conociéndola erradicamos el mismo, pero que puede que varíe incluso siendo la misma falla: un motor se puede parar por tener obstruido el circuito de combustible o por bajo nivel de aceite. Por eso es importante que el usuario esté compenetrado con el funcionamiento del equipo y de las particularidades del mismo, ya que el entorno y las condiciones de operación específicas del momento condicionan las conclusiones que obtengamos. El formato de la planilla deberá ser obviamente unificado para todos los usuarios, luego comparado y analizado, da cierta homogeneidad a la información. A la planilla se le incorporarán anexados, los gráficos del sistema de control específico. Como observación, diremos que dependiendo del sistema, podremos tener historial de fallas especificado para el equipo en forma general, o por componentes principales, por ejemplo podemos hablar del motor principal de propulsión como una suma de componentes principales que lo integran: circuito de lubricación, circuito de combustible, circuito de refrigeración y circuito de gases de escape. La recolección de los datos de los diferentes equipos y componentes de las unidades operativas o buques, se almacenarán en formato digital e impreso, pudiendo agrupar los mismos por el criterio que los usuarios establezcan. Una manera muy fiable de agrupar es estableciendo el tipo de buque, por ejemplo: corbeta, aviso o destructor; especificado por tipo de sistema: generación, propulsión o armamento, y luego por equipo y componente dentro del mismo. Los criterios de agrupamiento y selección pueden ser modificables. Ahora, ¿cómo hacemos para predecir cierta falla en un equipo? Nos remitiremos a la estadística, la cual nos da una herramienta bastante simple y conocida: la denominada curva de la bañera. Es una gráfica que representa los fallos durante el período de vida útil de una máquina, y se llama así por su forma de bañera cortada a lo largo. En la misma, se ven tres etapas: -Fallos iniciales: caracterizada por una alta tasa de fallos, que desciende en forma rápida con el tiempo. Puede deberse a equipos defectuosos, instalaciones incorrectas, desconocimiento por parte del usuario de los procedimientos, entre otras. -Fallos normales: etapa con tasa de fallas menores y constante. Los fallos son por causas aleatorias externas, por ejemplo accidentes, mala operación, condiciones inadecuadas externas. Es la zona esperable en la cual se debería desempeñar un equipo. Fallos de desgaste: la tasa de errores crece rápidamente, y su causa es el desgaste natural del equipo por el transcurso del tiempo. En la figura a continuación tenemos el esquema típico de la curva de bañera. Figura 4. Con los datos previos, sumados a los incorporados por el usuario en los diferentes tópicos que se realizan, va formando una buena base de referencia. Si poseemos los datos referidos a vida útil de los equipos, que puede darnos el fabricante, y comparándola con el tiempo de uso, que puede estar dado en horas de funcionamiento en forma genérica, sabremos en que zona del gráfico de curva de bañera estamos parados. Ahora, puede ocurrir un problema durante