HISTORIAL DE FALLAS INTEGRALES PARA UNIDADES NAVALES
En resumen tenemos nuestro sistema de
control, el cual recopila información que se
procesa, y se puede ver en varios formatos
admisibles; una vez vistos por el usuario se
almacenan en unidades propias o externas,
transferidas por un bus de datos. La última
parte de todo este proceso, es crear un registro
con fallas de estos equipos, añadiéndole
además experiencias y apreciaciones del
usuario.
El registro de fallas es la parte central del
proceso, puesto que luego de un tiempo, se
poseerá abundante información referida a
un equipo particular, y con ello tener una
predictibilidad o posibilidad de ocurrencia de
fallas, sabiendo en forma aproximada cuánto
tiempo tardará entre cada una, y además
obtener conclusiones, sobre acortar o ampliar
los períodos entre cierto mantenimiento
planificado. Con él, armaremos el historial de
fallas. Un historial es una relación detallada y
ordenada que se hace sobre el funcionamiento
de un equipo. Para efectuarlo, basta con
realizar una planilla de Excel, en la cual
incorporaremos tanta información como
requieran los usuarios del mismo, entre ellas:
equipo y sistema principal al cual pertenece,
falla ocurrida y causa, síntomas de la misma,
acciones correctivas inmediatas y posteriores
efectuadas, consideraciones particulares del
equipo afectado.
Mención especial respecto a la causa, porque
es la raíz del problema, y conociéndola
erradicamos el mismo, pero que puede
que varíe incluso siendo la misma falla: un
motor se puede parar por tener obstruido el
circuito de combustible o por bajo nivel de
aceite. Por eso es importante que el usuario
esté compenetrado con el funcionamiento del
equipo y de las particularidades del mismo, ya
que el entorno y las condiciones de operación
específicas del momento condicionan las
conclusiones que obtengamos.
El formato de la planilla deberá ser
obviamente unificado para todos los usuarios,
luego comparado y analizado, da cierta
homogeneidad a la información. A la planilla
se le incorporarán anexados, los gráficos
del sistema de control específico. Como
observación, diremos que dependiendo del
sistema, podremos tener historial de fallas
especificado para el equipo en forma general,
o por componentes principales, por ejemplo
podemos hablar del motor principal de
propulsión como una suma de componentes
principales que lo integran: circuito de
lubricación, circuito de combustible, circuito
de refrigeración y circuito de gases de escape.
La recolección de los datos de los diferentes
equipos y componentes de las unidades
operativas o buques, se almacenarán en
formato digital e impreso, pudiendo agrupar
los mismos por el criterio que los usuarios
establezcan. Una manera muy fiable de
agrupar es estableciendo el tipo de buque,
por ejemplo: corbeta, aviso o destructor;
especificado por tipo de sistema: generación,
propulsión o armamento, y luego por equipo y
componente dentro del mismo. Los criterios
de agrupamiento y selección pueden ser
modificables.
Ahora, ¿cómo hacemos para predecir cierta
falla en un equipo? Nos remitiremos a la
estadística, la cual nos da una herramienta
bastante simple y conocida: la denominada
curva de la bañera. Es una gráfica que
representa los fallos durante el período de
vida útil de una máquina, y se llama así por
su forma de bañera cortada a lo largo. En la
misma, se ven tres etapas:
-Fallos iniciales: caracterizada por una alta
tasa de fallos, que desciende en forma rápida
con el tiempo. Puede deberse a equipos
defectuosos,
instalaciones
incorrectas,
desconocimiento por parte del usuario de los
procedimientos, entre otras.
-Fallos normales: etapa con tasa de fallas
menores y constante. Los fallos son por causas
aleatorias externas, por ejemplo accidentes,
mala operación, condiciones inadecuadas
externas. Es la zona esperable en la cual se
debería desempeñar un equipo.
Fallos de desgaste: la tasa de errores crece
rápidamente, y su causa es el desgaste natural
del equipo por el transcurso del tiempo.
En la figura a continuación tenemos el esquema
típico de la curva de bañera. Figura 4.
Con los datos previos, sumados a los
incorporados por el usuario en los diferentes
tópicos que se realizan, va formando una
buena base de referencia. Si poseemos los
datos referidos a vida útil de los equipos, que
puede darnos el fabricante, y comparándola
con el tiempo de uso, que puede estar dado en
horas de funcionamiento en forma genérica,
sabremos en que zona del gráfico de curva de
bañera estamos parados.
Ahora, puede ocurrir un problema durante