Con el desarrollo tecnológico, y su aplicación en la industria alimenticia, han aparecido con el paso del tiempo nuevos métodos de conservación entre los que se encuentran:
Calentamiento infrarrojo, el alimento es sometido a rayos infrarrojos, lo que transfiere energía térmica al alimento. Se aplica en deshidratación, freído, pasteurización entre otros.
Calentamiento óhmico, se hace circular una corriente eléctrica a través de un alimento esto aumenta la temperatura uniformemente.
Atmosferas modificadas, se reduce el oxigeno, reemplazándolo por una combinación de gases como CO2, N2 Y O2. Esto disminuye la actividad de enzimas y microorganismos.