Mi manual del bebé Octava edición | Page 176

Salud bebé / Primeros auxilios
174

Manejo de la fiebre en casa

La fiebre es una señal de que el cuerpo se está defendiendo contra agresiones, que las hay de muy diversa índole. Por ejemplo, una infección por bacterias, un cuadro viral, una insolación, en fin, más de 150 causas.
Se considera fiebre una temperatura por encima de 37,5-38 ° C, medida en la axila, con termómetro.
Dele a su niño agua en abundancia para prevenir la deshidratación.
Un baño corto con agua tibia y envolverlo luego en una sábana o una toalla, le ayudarán a bajar la temperatura. La ducha de agua fría sólo se recomienda en casos muy extremos y puede, además, producir escalofrío, que ayuda a elevar la temperatura.
Vista a su hijo con ropa o pijama no muy gruesa. Abrigarlo en exceso ayuda a elevar la temperatura. Sólo abríguelo muy bien cuando tenga que sacarlo a la calle.
Evite los cambios bruscos de temperatura, especialmente del calor al frío, ya que eso genera más problemas.
Si hay fiebre, por encima de 38 ° C, adminístrele la dosis de acetaminofén que el pediatra le ha indicado, de acuerdo al peso del niño. La aspirina( ácido acetil salicílico) no se recomienda, salvo indicación expresa del pediatra.
En algunos casos puede ser necesario alternar acetaminofén e ibuprofeno, pero siempre por indicación y bajo la supervisión del pediatra.
Acuda de inmediato al médico si:
En el primer mes de nacido al bebé le da fiebre, aunque no parezca enfermo.
En los tres primeros meses le da fiebre por más de 24 horas, aunque no parezca enfermo.
Desde tres meses de edad: fiebre de más de tres días.
Luego del medicamento en dosis adecuadas y medios físicos, la fiebre no baja de 38 ° C o si debe administrar el medicamento antes de cuatro horas.
Fiebre que aparece y desaparece por más de tres días.
Además de la fiebre, el niño tiene dolor de cabeza, estado de confusión, vómito, diarrea y dolor de estómago; signos de deshidratación( poca saliva, ausencia de lágrimas), dolor para orinar, cambios en el comportamiento, dolor de oído o se tira la oreja, irritabilidad, convulsiones, erupción en la piel, aumento en el tamaño de las articulaciones, hinchazón en la parte blanda de la cabeza, silbidos al respirar.