Mi libro mi vida en la prensa escrita | Page 41

Página 41 de 102 ¡Craso error! Una actitud errática que hoy se está pagando con la sangre y la muerte de 12 personas inocentes que se encontraban disfrutando de la Navidad en uno de esos mercaditos tan característicos de Alemania. Y no hablemos de los casi 50 heridos que permanecen en los hospitales berlineses. Pero ahí no termina todo porque se ha dado una manifestación de ciudadanos en la que rechazan de plano la xenofobia y apoyan las políticas criminales de la Merkel. Evidentemente los alemanes no escarmientan. El problema de los refugiados debió solucionarse prontamente cuando llegaron a las costas europeas, pero se hizo con una lentitud pasmosa y no ha sido resuelto aún. Quizás hubiera sido apropiado enviarlos hacia naciones árabes que están en paz, como Arabia Saudita, que tiene la obligación, religiosa por demás, de abrir las puertas a sus hermanos de confesión islámica; empero, los saudíes no quieren problemas y prefieren seguir con su ritmo de vida lujoso y ver los acontecimientos desde sus yates y palacios. Lo cierto es que Europa no es para esos millones de inmigrantes por muchas razones. En todo caso, Angela Merkel cometió un error de grandes proporciones que le están costando caro a los alemanes. La Noche Vieja del 2015 violaron a una cantidad impresionante de mujeres alemanas los mismos musulmanes y ahora ha ocurrido este atentado terrorista. ¿A qué espera la díscola Canciller? Por supuesto las tragedias no han terminado, se van a producir más a pesar de la férrea vigilancia policial a la que ha sido sometido todo el país. Eso lo juro con la mano en alto. Atentados sangrientos en París, Bélgica, Alemania, Turquía –una nación que ya perdió la cuenta de esos hechos y sus muertos por la gran cantidad que se han producido-, también en los Estados Unidos. ¿A qué esperan los dirigentes políticos, si lo único que saben es hacer política barata e irresponsable cuando alcanzan el poder? Merkel, con el descaro que le es propio, presentó hace poco su candidatura a la reelección a la Cancillería y no me extrañaría que la reelijan, porque así son los alemanes de estos tiempos. A esta mujer hay que desterrarla a su casa o, aún mejor, enjuiciarla y llevarla a la cárcel por ser la responsable directa de las violaciones de mujeres y los muertos de Berlín hace pocos días, más lo que vendrá en estos meses. Pero será reelecta. Ello ni tergiversarlo siquiera a los alemanes y al futuro inmediato. Y es que los yihadistas, después de sus contundentes derrotas en Palmira, Alepo y Mosul, han cambiado su estrategia, adoctrinando por internet a jóvenes en Europa o enviando a los europeos que regresan al Viejo Continente. Son los llamados “lobos solitarios”; es decir, a las cucarachas se dificulta matarlas. Terminas con unas cuantas, pero vuelven a salir otras más no sabemos de dónde demonios. Tampoco con la muerte o captura del líder del Daesh (Estado Islámico), Abu backar al-bagdadi –según se ha hecho nombrar a sí mismo-, el terrorismo islámico va a desaparecer, porque una cucaracha de estas que se extermine, suben a la directriz a otra nueva. Así funcionan en procura de matar porque sí, porque odian a occidente y a todo lo que se mueva en occidente, sea humano, extraterrestre o animal irracional. ¿E Israel? La postura de la nación judía es prudente. Hasta el momento –hasta donde sabemos- solo se ha involucrado en el conflicto contra el terrorismo yihadista, por medio de asesores militares y armamento de bajo calibre, pero en proporciones muy escasas. Y es que los hebreos no quieren que los dementes islámicos les destrocen a base de atentados dinamiteros y suicidas, su paz, sus ciudades y ciudadanos.