METAÉTICA PSICOLOGÍA SOCIAL | Página 16

El hombre antiguo tenía otra percepción del tiempo, y de los entes desplegados en el hecho cultural. No proyectaba, ACTUABA, y es por eso que en nuestra actualidad espacio-temporal ya no hay cabida para conquistadores, guerreros, héroes, semidioses, dioses, ángeles y demonios, ideas arquetípicas que solo fluyen como contenidos arcaicos en el inconsciente colectivo. El hombre antiguo no era cultural, mas bien, era el fundamento de la historia, la historia misma. Alrededor de él giraba el universo entero, y esta reminiscencia la podemos percibir hoy en día cuando la historia oficial nos dice que el hombre antiguo concebía una COSMOGONIA ANTROPOCÉNTRICA; para luego desvirtuar la verdadera significación de esta afirmación al decir que según la ciencia positivista eso es un “error”, otorgando este centro a un sol central galáctico que muy posiblemente sea un colosal agujero negro. Que lejos estamos del verdadero SENTIDO METAFÍSICO que los antiguos le daban a su CENTRALIDAD ESCENCIAL. Por eso el hombre antiguo aspiraba a la divinidad. Y es mas, Prometeo, Aquiles, Herácles, Teseo, Dédalo, Jasón, los linajes de Reyes Dorios, los Césares de la Roma Imperial, Gilgamesh, Enoc, los Espartanos, los Arios, el Inca y su Casta, se consideraban dioses o descendientes de dioses. Hasta la mismísima Biblia nos habla de un tiempo donde existían gigantes llamados Nephilim, y de sus descendientes, los “héroes de la antigüedad” 2 ; Un tiempo cuando los Dioses caminaban sobre la tierra y enseñaban a los hombres las artes, la construcción de ciudades amuralladas y el DOMINIO DEL ALMA. 3 Por ejemplo en Esparta se enseñaba desde la niñez el dominio absoluto del animismo, es decir, de lo que en términos modernos podríamos denominar los ámbitos psicológicos. En la Hélade, hasta tenían un código semiótico, que para nosotros no es más que mitología indescifrable, para identificar los complejos psicológicos y neutralizarlos. La Diosa Venus o Palas Atenea puede asimilarse a la esfera inconsciente, cuyo dominio era vital para alcanzar el rango de ARIETE en la antigua Grecia. Edipo era la esfera racional o afectiva cuyo dominio permitía acceder a significaciones trascendentes, otorgaba lucide z mental y evitaba la locura. Teseo era él Yo consciente en busca del centro del laberinto, el Inconsciente, para dar muerte al Minotauro y ganar la inmortalidad. Y en todo el mundo antiguo, el mismo código semiótico: la MITOLOGÍA, que exaltaba la imagen arquetípica del héroe y la preponderancia femenina: El descenso de Innana a los infiernos, para resucitar y liderar a un ejército de “espectros” que buscan su liberación; el mismo mito para los pueblos semitas 2 Genesis 6 , 4. “La idea de que los hombres, partiendo de la bestialidad y del salvajismo, se elevaron lentamente hasta la civilización, es reciente. Este es un mito judeo-cristiano, impuesto a las conciencias, para expulsar un mito más antiguo, vigoroso y revelador. Cuando la humanidad era más fresca, más próxima a su pasado, en los tiempos en que ninguna conspiración bien urdida lo había expulsado aún de su propia memoria, sabia que descendía de dioses, de gigantes de los que habían aprendido todo. Recordaba una edad de oro en que los superiores, nacidos antes que ella, le enseñaron la agricultura, la metalurgia, las artes, las ciencias y el manejo del alma” El Retorno de los Brujos.- Luis Pawles y Jaques Bergier. 3 - 16 -