MATEGROUP Noviembre 2018 | Page 13

con un solo eclipse y demostró que era verdad. Mamá, me encanta escribir a ordenador, Cuando lo único genuino era que la tierra somos unos rebeldes a la hora de amar, que toda la vía láctea ya puede declararse en huelga que ese día iremos a trabajar, que no somos más que un instante en este lugar, pero vivimos como si la eternidad no fuese más que una hora que todavía no ha cumplido la mayoría de edad. Aunque detesto toldo lo que trae el Word 2016 como predeterminado. Sonara extraño pero es como si la existencia me hubiese concedido la habilidad de leer entre opciones de interlineado Y la verdad es que detesto el cuero del Calibri, los once puntos y el 1,0 de espaciado. La tierra podía contarle todo eso a la luna, con algún que otro engaño, o simplemente empezar la cita diciéndole que era su cumpleaños. Mamá, me enseñaste que la vida resumía en pedir disculpas, dar las gracias y decir por favor. Y también en guardar cada cinco minutos los archivos de Word, porque en cualquier momento podía producirse un apagón y nos quedábamos días sin luz. Mamá, gracias por tu gratitud, por todo lo bueno, de preocuparte del cuándo, del cómo, del dónde y con quien salía. Hola Yo y mi juventud. Esta carta debía haberla escrito hace dos años, A veces contestándote con mala actitud que tú y tus collejas me recordabas que, pa mala tú. Así que por esta vez permíteme hablar en primera persona Mamá, lo siento por entender demasiado tarde que por más veloz que sea el amor a primera vista Y os prometo que ya acabo. 13