moscas volantes, que en ocasio-
nes se asocia con patología grave
de retina.
A partir de los 60 años: En
esta etapa es importante la revi-
sión de la visión para detectar la
aparición tanto de las cataratas
como de la degeneración macu-
lar asociada a la edad (DMAE).
Las cataratas suelen cursar con
cambios frecuentes en la gradua-
ción y/o disminución de la agudeza
visual. Se trata de un proceso nor-
mal de envejecimiento del cristalino
que se puede solucionar mediante
la cirugía de cataratas con implan-
te de lente intraocular, corrigiendo
también en muchos casos la gra-
duación previa. Su diagnóstico
precoz permitirá elegir el mejor mo-
mento para llevar a cabo la cirugía.
Se debe descartar la aparición
de DMAE si se detectan irregulari-
dades en la visión central o meta-
morfopsia (las líneas rectas se ven
torcidas). En estos casos además
de la exploración del fondo de ojo
también es muy útil la realización
de una tomografía de coherencia
óptica u OCT macular. En el caso
de la DMAE, la velocidad con la
que se determinen las primeras
lesiones, más efectivo será el tra-
tamiento.
Los antecedentes familiares, el
tabaco, la hipertensión arterial, la
arterioesclerosis y la exposición a
radiaciones ultravioletas o dietas
estrictas son factores de riesgo a
la hora de padecerla, aunque no
hay modo de prevenir su apari-
ción porque va a asociada al en-
vejecimiento.
REVISIÓN SEGÚN LA PATOLOGÍA
PREVIA
La presencia de algunas en-
fermedades requiere la realiza-
ción de controles oftalmológi-
cos periódicos, a fin de prevenir
en algunos casos la afectación
visual (algunas enfermedades
generales, antecedentes fami-
liares de enfermedad ocular) o
la aparición de complicaciones.
Por tanto deberán hacerse re-
visiones sin falta aquellas per-
sonas que sufren estas patolo-
gías:
Miopes: Las personas con
miopías superiores a las cinco
dioptrías tienen riesgo de padecer
desgarros o desprendimientos de
retina.
Usuarios de lentes de con-
tacto: Se debe hacer una evalua-
ción del estado de la córnea de
forma periódica.
Antecedentes familiares de
enfermedad ocular: Las en-
fermedades oculares que tienen
un componente genético más
importante son el glaucoma y la
degeneración macular asociada
a la edad. El paciente no nota la
pérdida de visión hasta que la en-
fermedad se encuentra avanza-
da, por lo que se debe controlar
la presión intraocular a partir de
los 30 años.
Diabéticos: El nivel alto de
azúcar en sangre puede dañar
la retina y comprometer la visión,
pudiendo, sin tratamiento, oca-
sionar ceguera. Es importante
una revisión del fondo de ojo en el
momento del diagnóstico y pos-
teriormente de forma anual. Su
oftalmólogo le indicará la frecuen-
cia de las revisiones en función
del tipo de diabetes, el tiempo de
evolución y del control glucémico
Cefalea: Cuando se sufren do-
lores de cabeza continuos es ne-
cesario acudir al oftalmólogo ya
que a veces están relacionados
con defectos refractivos u otra
patología ocular.
Purificación Vega Guerra
Médico de Sanidad Marítima
Madrid
Enero 2019 65
Mar