La Compañía de Defensa,a la que pertenecía Furnel, estaba compuesta por 105 soldados, de los cuales uno falleció. “Uno de nuestros compañeros quedó allá, él era cartero”, recordó el Veterano. Aquel 1 de mayo el joven había ido a llevar cartas al aeropuerto y se tuvo que quedar a dormir en el lugar ya que los soldados argentinos no podían salir de noche porque había había alerta roja; y ese mismo día comenzaron los ataques de los ingleses y la zona en la que se encontraba el soldado fue atacada.
La historia de Furnel continúa, es larga y hay mucho para contar, las emociones no están ausentes en el relato y con el transcurrir de los minutos se fueron agudizando cada vez más; claro faltaba narrar el momento en el que él, junto a otros soldados fueron tomados como prisioneros por los ingleses.
“Durante cinco días fuimos prisioneros de los ingleses. Nosotros no sabíamos cómo nos iban a tratar pero ellos vieron que éramos chicos, así que entregamos nuestras armas y ellos nos sacaron nuestras mantas...para no pasar frío nos refugiábamos entre cinco en los pozos zorros”, manifestó el Veterano.
Ya cerrando su relato, Furnel comentó que cuando se enteraron que terminó la guerra se pusieron a llorar aunque no sabían si era de felicidad, ya que iban a poder volver con sus familias, o de tristeza porque perdieron ese territorio y ahora iba a flamear una bandera inglesa en vez de la argentina.