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Pero ¿qué pasa si estos sentimientos no son leves? ¿Y si se prolongan en el tiempo? En este caso, probablemente estemos sufriendo una depresión post parto y debamos ponernos en manos de un profesional. Sin el tratamiento adecuado, la depresión post parto puede dilatarse mucho en el tiempo y puede interferir en los cuidados y en la relación madre-hijo.
Algunos de los síntomas que pueden presentarse en caso de depresión postparto son: tristeza y ganas de llorar sin motivo aparente, ansiedad, insomnio o somnolencia excesiva, irritabilidad, apatía y fatiga.
Por tanto, si te encuentras en esta situación, o conoces a alguien que crees que puede estarlo, es preferible solicitar ayuda profesional cuanto antes. Como dicen por las redes sociales: “la depresión y la ansiedad no es por ser débil, es por haberse mantenido fuerte demasiado tiempo”
Esta tristeza es normal, la sufre cerca del 80% de las mujeres y puede aparecer entre pocos días y un mes después del parto. No debemos sentirnos culpables si la sufrimos y lo mejor que podemos hacer es sentirla y sanarla, ya que si intentamos aparentar que estamos bien no nos estamos ayudando. Son sentimientos leves y se pasan en poco tiempo una vez nos hemos adaptado a nuestro nuevo estado.
Mi nombre es Mariló, soy mamá de dos niños que son mis maestros y mi motor y además soy farmacéutica, profesora de educación secundaria, doula, asesora de lactancia, asesora de porteo, monitora de masaje infantil, monitora de la Pedagogía Blanca y muchas cosas más. Mi pasión es el mundo de la maternidad y la educación, ya que son nuestros hijos los que van a cambiar el mundo.
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