5
No obstante, la realidad de esta situación a Nivel Nacional, en Venezuela se ha convertido en un problema grave las condiciones de los centros de reclusión, así como también las circunstancias infrahumanas en las que viven día a día los privados de libertad. Y es que una cosa, es lo que es el deber ser, y otra muy distinta la realidad a la cual se encuentran sometidos este tipo de personas. Nuestra realidad, no ha llevado a apreciar la constantes violación de los derechos humanos y su dignidad, cuando podemos ver la falta de higiene, la falta de comida, la falta de infraestructura, falta de asistencia médica, irrespeto a la dignidad, el debido proceso, la falta de alimento adecuado, y lo más importante programas de inclusión a la sociedad, es grave la situación de hacinamiento en nuestras cárceles y la negligencia del gobierno en plantear y buscar una solución a esta problemática que se ha venido agravando con el transcurrir de los años, tenemos alrededor de un 200 % de hacinamiento que hace imposible el control por parte de los organismos competentes de las cárceles, lo que conlleva a que esa actividad entre el privado-institución, se vea distorsionada, y trayendo como consecuencia la vulnerabilidad del privado y el desconocimiento de la dignidad de la que tanto se habla.
Para finalizar, es importante cerrar con las siguientes recomendaciones en el presente tema, respetar y dar cumplimiento a las diferentes recomendaciones que han sido hechas por diferentes organismos internacionales para mejorar la situación de las prisiones venezolanas, eliminar el uso de retenes policiales como centros de reclusión por no reunir estos las condiciones para tener prisioneros por más de 48 horas, implementar mecanismos modernos y no invasivos para las requisas que se practican a las personas que visitan los recintos penitenciarios y de manera especial las damas, controlar el ingreso de armas de fuego a los recintos carcelarios y que las personas incursas en esos delitos sean debidamente sancionadas, dar una alimentación balanceada y nutritiva a los reclusos de las diferentes cárceles del país, dar cumplimiento a lo establecido en la Constitución de la República de Venezuela en lo referente al sistema penitenciario.