3er. Mandamiento
Santificarás Las Fiestas
El tercer mandamiento nos manda honrar a Dios con obras de culto en los días de fiesta.
En la ley antigua los días de fiesta eran los sábados y otros días particularmente solemnes para el pueblo hebreo; en la ley nueva son los domingos y otras festividades establecidas por la Iglesia.
En la ley nueva se santifica el domingo, que significa día del Señor, en lugar del sábado, porque en tal día resucitó Jesucristo Nuestro Señor.
En los días de fiesta se nos manda como obra de culto asistir devotamente al santo sacrificio de la Misa.
¿Cómo se vive?
Asistiendo a la Doctrina cristiana, al sermón y a los divinos oficios, recibiendo a menudo y con las debidas disposiciones los sacramentos de la Penitencia y de la Eucaristía ejercitándose en la oración y en obras de cristiana caridad con el prójimo.
¿Qué nos Prohibe?
El tercer mandamiento nos prohíbe las obras serviles y otras que nos impidan el culto a Dios.