en el barco nos hicimos amigos, incluso hicimos hasta
un concierto arriba del barco, con afiches y todo, porque
tenían imprenta. Los italianos nos dijeron “no, bájense en
Barcelona porque les va a quedar más cerca de Francia”. Unos amigos de Albertito, que eran bien recorridos,
tenían plata y tenían una casa al sur de Francia que nos
prestaron. Ese era nuestro primer objetivo, llegar a esa
casa, instalarnos, empezar a aprender a hablar francés,
todo así pensado muy ingenuamente. Bueno, esa ingenuidad nos ayudó bastante.
Nosotros decíamos “llevamos plata para mantenernos
dos semanas, en dos semanas ya estamos trabajando
ya”, y nada. En dos semanas uno ya sabe cómo ir a comprar el pan y empiezas a conocer gente del barrio. El
hacerse amigos es de otra manera, no es como acá.
Eduardo: Hacemos el viaje que es fabuloso y llegamos a
Barcelona, y efectivamente ya nosotros, a través de EMI
Argentina, habíamos hecho contacto con EMI Londres,
entonces EMI Londres pone un bus a nuestra disposición en el puerto de Barcelona. El desembarco es larguísimo, creo que llegamos al amanecer y a las cuatro de la
tarde o cinco recién estábamos arriba del bus, para partir
a Biarritz, que era donde estaba nuestro primer paradero,
que era donde nos habían prestado esa casa.
Me acuerdo que llegamos de noche, no sé cuántas
horas son de Barcelona a Biarritz, deben ser a lo mejor
unas cuatro o cinco horas, y llegamos a Biarritz. Biarritz
es una ciudad muy lujosa, en los años 1910 fue un balneario muy codiciado por los millonarios, qué sé yo, tuvo
su época. Hay un casino también. Verdaderamente es
montañoso porque son los Pirineos, es el País Vasco de
Claudio, Alberto Ledo, Gato, Pájaro Canzani,
Gabriel y Eduardo en Biarritz. Fotografía original
de archivo Los Jaivas.