Consideraciones Finales
Conforme a lo expuesto, se puede concluir que si bien militarmente hablando Estados Unidos es una potencia que no tiene competidores en el mundo, económicamente tiende a ser “una” de las diversas economías importantes, sin que llegue a dominar. La situación tiende a empeorar para ese país, de cara a la crisis financiera actual. En este sentido, Estados Unidos requiere de la cooperación internacional para buscar soluciones al desafío que enfrenta, dado que su relativo poder económico le garantiza que será tomado en cuenta en cualquier negociación para lidiar, por ejemplo, con la crisis financiera. Sin embargo, Estados Unidos enfrenta un fuerte endeudamiento, equivalente al 75 por ciento de su PNB la deuda ascendía hacia septiembre de 2008, a 13.6 billones de dólares; un gran déficit en su balanza de cuenta corriente; decrecientes tasas de ahorro interno; jubilaciones masivas de la generación de los llamado baby boomers; más una deuda federal de 11.4 billones de dólares o 34,348 dólares per cápita.
El exacerbado gasto militar ha hecho su parte al empeorar el perfil económico de Estados Unidos, y si bien la administración del presidente Barack Obama parece resuelta a reducir el presupuesto en defensa, no podrá efectuar recortes dramáticos, en particular porque los compromisos que mantiene en Afganistán e Irak no lo permiten.