PERSPECTIVA, SITUACIÓN Y ROL EN LAS
MUJERES DEL HOY
Silvia Huamaní Bendezú
En el tiempo que vivimos, como nunca antes en la historia, las mujeres, con
todos sus derechos ganados y potenciales,
van sintiendo la necesidad intensa de ocupar un lugar protagónico en los diferentes
aspectos que involucran la vida social. Me
centraré específicamente en las mujeres,
su situación y sus roles dentro del espacio
social y cultural, teniendo en cuenta que
género no es solo hablar de ellas.
Si se analiza a la mujer dentro de la
historia, veríamos que ellas han sido desvalorizadas, desapercibidas y relegadas.
Desde que el ser humano comenzó a despejar tierras para la agricultura, el destino de las mujeres casi siempre fue decidido por varones, no quiero culpar del todo a
ellos y menos generalizar por la crisis que
vivimos (económica, moral, medioambiental entre otras). Pero no cabe duda alguna
de que un mejor equilibrio entre los géneros en la toma de las decisiones ayudaría a
lograr un mejor equilibrio con la naturaleza. Que hubiera sido si desde un principio
era tomada en cuenta el lugar que ocupaba en la vida social, sin embargo,
Nuestro pasado cultural siempre ha
sido simbolizado con casos, racistas, clasistas, sexistas y androcéntrico que conllevo un efecto de proyección ante la sociedad
de una visión del pasado donde la mujer se
sitúa en unos roles muy determinados, lo
que ayuda a fijar estereotipos en la actua12
lidad y justificar actitudes y valores.
Si bien se dice que el mundo ha evolucionado mucho, pero en las sociedades
como la nuestra sigue existiendo prejuicios en contra de las mujeres a pesar de
compartir la misma naturaleza humana
–con los varones-, con ello no quiero victimizar a la mujer (madre, antropóloga,
hija, profesora, universitaria, ingeniera,
arquitecta, etc.) que desempeñe un rol en
su estructura social, más aun si tiene en
conocimiento que no solamente tiene el
papel de espectadora en su realidad, si
no sigan desarrollando su potencialidad
y cultivando activamente la conciencia
profesional que sería una manera de que
los prejuicios de esta sociedad se borren.
Se observa en la sociedad los roles fuertemente implantados en las mujeres que
han dedicado su vida al trabajo doméstico,
es decir, las amas de casa que nunca han
accedido al trabajo remunerado y para
quienes su función fundamental y única
ha sido ocuparse de la familia.
Tan interiorizado tienen estas mujeres este papel que aun cuando ellas comienzan a ser dependientes y necesitan
que otras personas se ocupen de ellas,
siguen apegadas a su rol de cuidadoras y
son incapaces de delegar. No debemos olvidar que las mujeres que han dedicado su
vida al cuidado de la familia, siempre han
tenido una posición subordina al padre o