Literatura BDSM La Sumisa Insumisa ( Rosa Peñasco ) | Page 73

Reconozco que quizás por mi fascinación ante el significado de los símbolos, la estética y las señales, de entre esos detalles me encantó el análisis del trisquel o el emblema del BDSM. De lejos, era fácil asociarlo con el distintivo del yin y el yang pero, en realidad, se trataba de un círculo dividido en tres, y no en dos partes. Tres triángulos curvos, ondulados y de borde metálico que, a su vez y a modo de botón antiguo, estaban taladrados por un agujero que dejaba entrever el fondo. —Un símbolo, del tipo que sea, nunca tiene adornos gratuitos —comenzó a explicarme Sapiens, haciendo acopio de su didáctica paciente—. Por ejemplo, en BDSM, el círculo significa la unión de una comunidad, cuyos miembros se preservan y resguardan entre sí. —¡Vaya, todo queda en casa! Pero «esta casa redonda» está dividida en tres partes, ¿o no? —Claro. No olvides que el número tres es mágico en muchos entornos. Para empezar, en el mundo BDSM, el número tres alude a las distintas versiones del ARTE: Ataduras y Disciplina, Dominación y Sumisión y Sadismo y Masoquismo. —¡Ahhhhhhh! ¿Y el número tres no tendrá algo que ver con aquello que me dijiste sobre las prácticas SSC, Sanas, Seguras y Consensuadas? —¡Estupenda deducción! Por supuesto que tiene que ver con eso, aunque también tiene que ver con los tres roles que admite el BDSM: AMOS y AMAS, sumisos y sumisas y switches. —Y los puntos situados en cada una de las tres partes del círculo, ¿qué significan? —En un trisquel, no hay simples puntos, sino huecos. El fondo ha de verse siempre a través de esos agujeros que, para algunos, no son más que la muestra del terrible vacío interior que sufre quien no ha encontrado a su complemento. —¿Y para ti? —Para mí también. Recuerda que yo no busco a una sumisa, sino a mi sumisa. No busco una mujer, sino a la mujer con la que podré sentirme completo, igual que ella podrá sentirse completa cuando me encuentre a mí. Botón y ojal, ¿recuerdas? —En fin, cambiemos de tema, ¿existen más significados en el trisquel? —¡Claro! Hay quien dice que el hecho de que el círculo sea metálico alude a las cadenas, a la posesión, a la propiedad. Para otros, no es casualidad que, tras ese marco metálico, el fondo sea negro. En fin, ¿te había dicho que el negro es el color del BDSM?