Literatura BDSM Justine o Los Infortunios de La Virtud (Sade) | Page 22

exhortado a no perdonar a esos viajeros, sino sólo por nuestra seguridad. Son las leyes las culpables de estos crímenes, no nosotros: mientras ajusticien tanto a los ladrones como a los asesinos, jamás se cometerán robos sin asesinatos. Como los dos delitos se castigan en igual medida, ¿por qué negarse al segundo si puede encubrir el primero? ¿De dónde sacáis además —prosiguió esta horrible criatura— que doscientos luises no valgan tres asesinatos? Siempre hay que calcular las cosas por la relación qu