Literatura BDSM Cincuenta sombras más oscuras | Page 70
—¿Quién?
Sus labios se convierten en una línea tensa, pero no dice nada.
—¿Quién? —insisto.
—Es Leila.
Yo trago saliva. ¡La ex sumisa! Recuerdo que Christian habló de ella antes
de que voláramos en el planeador. De pronto, su cuerpo emana tensión. Algo pasa.
—¿La chica que puso «Toxic» en tu iPod?
Me mira angustiado.
—Sí. ¿Dijo algo?
—Dijo: «¿Qué tienes tú que yo no tenga?», y cuando le pregunté quién era,
dijo: «Nadie».
Christian cierra los ojos, como si le doliera. ¿Qué ha pasado? ¿Qué
significa ella para él?
Me pica el cuero cabelludo mientras la adrenalina me recorre el cuerpo. ¿Y
si le importa mucho? ¿Quizá la echa de menos? Sé tan poco de sus anteriores… esto…
relaciones. Seguro que ella firmó un contrato, e hizo lo que él quería, encantada de
darle lo que necesitaba.
Oh, no… y yo no puedo. La idea me da náuseas.
Christian sale de la cama, se pone los vaqueros y va al salón. Echo un
vistazo al despertador y veo que son las cinco de la mañana. Me levanto, me pongo su
camisa blanca y le sigo.
Vaya, está al teléfono.
—Sí, en la puerta de SIP, ayer… por la tarde —dice en voz baja. Se vuelve
hacia mí y, mientras me dirijo hacia la cocina, me pregunta—: ¿A qué hora
exactamente?
—Hacia… ¿las seis menos diez? —balbuceo.
¿A quién demonios llama a estas horas? ¿Qué ha hecho Leila? Christian
transmite esa información a quien sea que esté al aparato, sin apartar los ojos de mí,
con expresión grave y sombría.
—Averigua cómo… Sí… No me lo parecía, pero tampoco habría pensado
que ella haría eso. —Cierra los ojos, como si sintiera dolor—. No sé cómo acabará
esto… Sí, hablaré con ella… Sí… Lo sé… Averigua cuanto puedas y házmelo saber. Y
encuéntrala, Welch… tiene problemas. Encuéntrala.
Cuelga.
—¿Quieres un té? —pregunto.
Té, la respuesta de Ray a cualquier crisis y la única cosa que sabe hacer en
la cocina. Lleno el hervidor de agua.
—La verdad es que me gustaría volver a la cama.
Su mirada me dice que no es para dormir.
—Bueno, yo necesito un poco de té. ¿Te tomarías una taza conmigo?