Literatura BDSM Cincuenta sombras más oscuras | Page 307

Le sonrío con toda la amabilidad de la que soy capaz. —Necesito una copia impresa de mi agenda de trabajo en Nueva York, junto con diez fotocopias. Y encárgate de que empaqueten los folletos. ¡Y tráeme un café! —gruñe, y entra con paso enérgico en su despacho. Suelto un suspiro de alivio y, cuando cierra la puerta, le saco la lengua. Cabrón… *** A las cuatro en punto, Claire llama desde recepción. —Mia Grey te llama por teléfono. ¿Mia? Espero que no quiera que vayamos al centro comercial. —¡Hola, Mia! —Ana, hola. ¿Cómo estás? —dice con entusiasmo desbordante. —Bien. Tengo mucho trabajo hoy. ¿Y tú? —¡Estoy de lo más aburrida! Y, para entretenerme con algo, estoy organizando una fiesta de cumpleaños para Christian. ¿El cumpleaños de Christian? Vaya, no tenía ni idea. —¿Cuándo es? —Lo sabía. Sabía que no te lo habría dicho. Es el sábado. Mamá y papá quieren que venga todo el mundo a comer para celebrarlo. Te estoy invitando oficialmente. —Oh, eso es estupendo. Gracias, Mia. —Ya he telefoneado a Christian y se lo he dicho, y él me ha dado tu teléfono de aquí. —Genial. Mi mente ya está dando vueltas: ¿qué demonios voy a comprarle a Christian por su cumpleaños? ¿Qué le compras a un hombre que tiene de todo? —Y la próxima semana podríamos quedar para comer. —Claro. ¿Y qué tal mañana? Mi jefe estará en Nueva York. —Oh, eso sería fantástico, Ana. ¿A qué hora? —¿A la una menos cuarto? —Ahí estaré. Adiós, Ana. —Adiós. Cuelgo. Christian. Cumpleaños. ¿Qué demonios puedo comprarle? De: Anastasia Steele Fecha: 15 de junio de 2011 16:11 Para: Christian Grey Asunto: Antediluviano Querido señor Grey: ¿Cuándo, exactamente, pensaba decírmelo?