Literatura BDSM Cincuenta sombras de Grey ( E.L. James ) | Page 327
Mia me abraza cariñosamente cuando nos despedimos.
—¡Pensábamos que nunca encontraría una chica! —comenta con entusiasmo.
Yo me sonrojo y Christian vuelve a poner los ojos en blanco. Frunzo los labios.
¿Por qué él sí puede y yo no? Quiero ponerle los ojos en blanco yo también, pero
no me atrevo, y menos después de la amenaza en la casita del embarcadero.
—Cuídate, Ana, querida —me dice amablemente Grace.
Christian, avergonzado o frustrado por la efusiva atención que recibo del resto
de los Grey, me coge de la mano y me acerca a su lado.
—No me la espantéis ni me la miméis demasiado —protesta.
—Christian, déjate de bromas —lo reprende Grace con indulgencia y una
mirada llena de amor por él.
No sé por qué, pero me parece que no bromea. Observo subrepticiamente su
interacción. Es obvio que Grace lo adora, que siente por él el amor incondicional de
una madre. Él se inclina y la besa con cierta rigidez.
—Mamá —dice, y percibo un matiz extraño en su voz… ¿veneración, quizá?
—Señor Grey… adiós y gracias por todo.
Le tiendo la mano, pero ¡también me abraza!
—Por favor, llámame Carrick. Confío en que volvamos a verte muy pronto,
Ana.
Terminada la despedida, Christian me lleva hasta el coche, donde nos espera
Taylor. ¿Habrá estado esperando ahí todo el tiempo? Taylor me abre la puerta y
entro en la parte trasera del Audi.
Noto que los hombros se me relajan un poco. Dios, qué día. Estoy agotada, física
y emocionalmente. Tras una breve conversación con Taylor, Christian se sube al
coche a mi lado. Se vuelve para mirarme.
—Bueno, parece que también le has caído bien a mi familia —murmura.
¿También? La deprimente idea de por qué me ha invitado me vuelve de forma
espontánea e inoportuna a la cabeza. Taylor arranca el coche y se al V