Literatura BDSM Cincuenta sombras de Grey ( E.L. James ) | Page 105

Yo soy la polilla y él es la luz, y voy a quemarme. Lo sé. —¡Come! —No. Todavía no he firmado nada, así que creo que haré lo que yo decida un rato más, si no te parece mal. Sus ojos se dulcifican y sus labios esbozan una sonrisa. —Como quiera, señorita Steele. —¿Cuántas mujeres? —pregunto de sopetón, pero siento mucha curiosidad. —Quince. Vaya, menos de las que pensaba. —¿Durante largos periodos de tiempo? —Algunas sí. —¿Alguna vez has hecho daño a alguna? —Sí. ¡Maldita sea! —¿Grave? —No. —¿Me harás daño a mí? —¿Qué quieres decir? —Si vas a hacerme daño físicamente. —Te castigaré cuando sea necesario, y será doloroso. Creo que estoy mareándome. Tomo otro sorbo de vino. El alcohol me dará valor. —¿Alguna vez te han pegado? —le pregunto. —Sí. Vaya, me sorprende. Antes de que haya podido preguntarle por esta última revelación, interrumpe el curso de mis pensamientos. —Vamos a hablar a mi estudio. Quiero mostrarte algo. Me cuesta mucho procesar todo esto. He sido tan inocente que pensaba que pasaría una noche de pasión desenfrenada en la cama de este hombre, y aquí estamos, negociando un extraño acuerdo.