( Cuento )
Alla en la pampa
Carlos A . Sánchez Guillén
Un silbido lejano alertó a los ojos apurados que venían tomando forma en el Cerro Colorado . El calor sobre la tierra aturdía los ojos de Cata , quien había llegado a estas pampas de muy temprano , acompañada de un perro que era un año mayor que ella , y 3 más que Solis .
Las sombras de las ovejas se acercaron a pasos desordenados , Solis hacía tronar la waraka , daba señal a los perros para que rodearan a los despistados animales , para que la calma vuelva a dominar y el silencio se deje escuchar . La marcha del tiempo se abría contemplando cada arroyo , se despejaba cada neblina de a poco . Soledad suena tan bien como Solis que desaparece antes que la madrugada y teme sus traumas de ayer . Camina sobre el recinto que se armó , teme ver a las golondrinas que de vez en cuando bajan a mezclarse con su ganado . Cata estudia el silencio , se ríe de él , y él nunca pronunció a viva voz la desesperación de la tragedia ni el nombre de Catalina . Sus gestos de niña confundían y embriagaban la desnudez del vacío .
— Solischa ¿ Por qué has demorado tanto ?
— Es que tenía que acompañar a mi mamacha hasta la plaza , después he cocinado rapidito antes que papacha llegue de Pongos .
— Yo he tenido que despachar a mi hermanito Rodolfo para que llegue tempranito a la escuela , lo he hecho despertar de noche todavía , después lo he hecho comer bastante , porque el otro día casi desmayando llegó todo wañurinko .
— Si pué ese Rodulfucha . ¿ En qué grado ya está ?
— Reciencito ha entrado a la escuela . Mi papá vendió cuatro sacos de cebada y con eso ha pagado a la escuela . Mi papá dice que él primero tiene que estudiar hasta quinto grado y luego me va a hacer estudiar a mí , hasta quinto también , pero yo estoy
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