LICEO ANTIOQUEÑO DE LA UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA LICEO UDEA | Page 86

De Liceo a Ciudadela Universitaria. Historia de la sede de Robledo de la Universidad de Antioquia Murales Tradición en ese entonces, la decoración de las instalaciones educativas con murales, esculturas y otras obras tenía una función tanto estética como simbólica, en tanto evocación de temas socioculturales importantes. No hay qué indagar mucho para inferir que parte del propósito de esta costumbre habría sido motivar el respeto y consideración por la cultura, los valores y el conocimiento. Dos edificaciones de la Ciudad Universitaria de Antioquia, aledañas a la sede del Liceo, estaban bellamente decoradas con murales: la Facultad de Minas de la Universidad Nacional, con obras del maestro Pedro Nel Gómez y la Escuela de Ingeniería Química de la Universidad de Antioquia, con obras de los maestros Pedro Nel Gómez y León Posada. Los murales que adornan los cuatro pabellones de enseñanza del Liceo Antioqueño fueron obra de los profesores de artes vinculados al Liceo Antioqueño, maestros Rubén Darío Tobón Calle y Jorge Cárdenas Hernández, ambos con una sólida formación, experiencia y amplio reconocimiento en el país. Su elaboración empezó en 1962 41 y los estudiantes donaron los materiales para su realización. Fueron restaurados en 1991, bajo la dirección de Martha Isabel Isaza. Acompañando el mural Historia de la Universidad de Antioquia, que se describe más adelante, encontramos la siguiente información relacionada con el estado de las obras y el proceso de restauración: Estado de conservación Igual que los otros murales, la obra sufría una serie de deterioros de diferente índole: grietas del soporte por asentamiento estructural, faltantes de capa de preparación y de película pictórica, falta de adherencia, grietas, fisuras, decohesión, suciedad acumulada y, principalmente, daños causados por el hombre, como la pintura que colocaron sobre el microscopio y los grafitis hechos con aerosol negro. Tratamiento realizado El objeto de la restauración es recuperar el concepto original de legibilidad del bien cultural. La restauración de las formas y de las representaciones, respetando siempre el original, la reintegración de los faltantes y de las partes arruinadas se integraron armoniosamente con el todo. Todas las obras requieren mayor atención, a cada una se le debe agregar la placa con su descripción y delimitar un área de aproximación, para evitar daños. 86