XII
NOTA PRELIMINAR
ro frente a la historia peruana prehispánica ha sido objeto de distorsiones mal intencionadas, por eso es indispensable hacer una precisión, con toda la amplitud que la importancia del asunto reclama, y a base de su propio e inconfutable testimonio.
José de la Riva-Agüero es el gran historiador moderno del Perú integral. Todos los legados históricos que nutren y forman nuestro ser nacional y que enriquecen nuestra conciencia de esa nacionalidad merecieron su atención inteligente y constante y fueron objeto de su sentimiento patriótico, de su encendida y profunda pasión peruana. Nada más anacrónico, anticientífico e injusto que hacer bandera de Riva-Agüero para una visión fragmentaria, unilateral o excluyente del Perú. Dentro de su concepción cristiana de la vida y de su sólida jerarquía de valores, todas las épocas de la historia peruana tienen para él un sentido creador propio en el proceso formativo de lo que llamamos la peruanidad.
En el célebre epílogo de La '] 1istoria en el Perú( 1910), que significó el arranque de una vigorosa corriente de in-. terpretación de nuestra historia y una nueva actitud ante su sentido trascendente, afirmó Riva-Agüero: "... la nacionalidad no estará definitivamente constituída mientras en la conciencia pública y en las costumbres no se imponga la imprescindible solidaridad y confraternidad entre los blancos y mestizos y los indios. No hay raza de las que habitan el territorio ni hay época de los sucesos realizados en él que puedan considerarse ajenas a nuestra idea de patria y cuyo olvido o menosprecio no enflaquezca y menoscabe el patriotismo, porque todas ellas com · ponen el cuerpo y el alma del Perú " 1. " El patriotismo-dijo en 1944, poco antes de su muerte- se alimenta y vive de la Historia y de la tradición. La palabra patria
1 Obras Completas, T. IV, Lima, 1965, pp. 505 · 506.