Libro de ENOC BIBLIA COMPLETA (Enoc) | Page 115

27 Génesis 21. 1–21 Abraham. Visitó Jehová a Sara, como había dicho, e hizo Jehová con 21 Sara como había hablado. Y Sara concibió y dio a Abraham 2 un hijo en su vejez, en el tiempo que Dios le había dicho. Y 3 llamó Abraham el nombre de su hijo que le nació, que le dio a luz Sara, Isaac. Y circuncidó Abraham a su hijo Isaac de 4 ocho días, como Dios le había mandado. Y era Abraham de 5 cien años cuando nació Isaac su hijo. Entonces dijo Sara: Dios 6 me ha hecho reír, y cualquiera que lo oyere, se reirá conmigo. Y añadió: ¿Quién dijera a Abraham que Sara habría de dar 7 de mamar a hijos? Pues le he dado un hijo en su vejez. Y 8 creció el niño, y fue destetado; e hizo Abraham gran banque- te el día que fue destetado Isaac. Y vio Sara que el hijo de 9 Agar la egipcia, el cual ésta le había dado a luz a Abraham, se burlaba de su hijo Isaac. Por tanto, dijo a Abraham: Echa 10 a esta sierva y a su hijo, porque el hijo de esta sierva no ha de heredar con Isaac mi hijo. Este dicho pareció grave en gran 11 manera a Abraham a causa de su hijo. Entonces dijo Dios a 12 Abraham: No te parezca grave a causa del muchacho y de tu sierva; en todo lo que te dijere Sara, oye su voz, porque en Isaac te será llamada descendencia. Y también del hijo de la 13 sierva haré una nación, porque es tu descendiente. Entonces 14 Abraham se levantó muy de mañana, y tomó pan, y un odre de agua, y lo dio a Agar, poniéndolo sobre su hombro, y le en- tregó el muchacho, y la despidió. Y ella salió y anduvo errante por el desierto de Beerseba. Y le faltó el agua del odre, y 15 echó al muchacho debajo de un arbusto, y se fue y se sentó 16 enfrente, a distancia de un tiro de arco; porque decía: No veré cuando el muchacho muera. Y cuando ella se sentó enfrente, el muchacho alzó su voz y lloró. Y oyó Dios la voz del mu- 17 chacho; y el ángel de Dios llamó a Agar desde el cielo, y le dijo: ¿Qué tienes, Agar? No temas; porque Dios ha oído la voz del muchacho en donde está. Levántate, alza al muchacho, y 18 sostenlo con tu mano, porque yo haré de él una gran nación. Entonces Dios le abrió los ojos, y vio una fuente de agua; y 19 fue y llenó el odre de agua, y dio de beber al muchacho. Y 20 Dios estaba con el muchacho; y creció, y habitó en el desier- to, y fue tirador de arco. Y habitó en el desierto de Parán; 21