EVENTOS
en cumplimiento de la ley, tuviera que pasar al retiro,
lo hicieron como todo hombre de bien: es decir con la
frente en alto y las manos limpias. No otro cosa podría
exigir la institución a quienes iban a ser defensores de la
Constitución y las leyes, responsables del orden interno
de la Nación, de la vigencia de los Derechos Humanos,
de la Justicia y la razón. Una comparación de roles, nos
demuestra que las F .A.A. a pesar de su mejor estatus
.F
social solo tienen el encargo de defender a la Patria en
casos de conflicto bélico, situación que es siempre una
eventualidad, en tanto que el Policía es el soldado de la
paz dispuesto a defender permanentemente es decir en
todo tiempo lugar y circunstancia, la ley allí donde se
pretender transgredirla.
Después de ello el servicio descarnado en las diferentes unidades de Costa, Sierra y Selva para muchos,
una experiencia que contrastaba con las enseñanzas
en la vieja escuela. Encontraron tal vez, junto con los
logros y las satisfacciones personales no pocas incomprensiones así como grandes decepciones porque gentes que parecían ídolos se mostraron como verdaderas
estatuas con pies de barro.
Por eso resulta edificante resaltar en este día la figura del Sr. Teniente Coronel Leopoldo Soto Navarro
cuyo paso por la institución fue una sucesión de demostraciones de conocimiento de la función policial,
de cumplimiento del deber y acrisolada honradez a
tal punto que senadores y diputados del Congreso
Nacional, le otorgaron el título de “Incorruptible” y
54
que lamentablemente desapareciera trágicamente al
estrellar el avión que piloteaba en las estribaciones de
la serranía de la Libertad. Hoy constituye el ejemplo
más claro de la lucha de la Policía contra la delincuencia y contra la corrupción.
No podemos tampoco dejar pasar por alto en
esta mañana de remembranzas y recordar la ejemplar conducta del General Barreto Bretoneche que
con ocasión de nuestro aniversario institucional, supo
expresar antes las autoridades asistentes al acto, con
sinceridad, con buena fe, con espíritu constructivo,
con respeto por el derecho ajeno pero sin temor de
decir la verdad, de la problemática institucional. La
verdad entre los políticos es a veces una herejía y por
haber expuesto valientemente la realidad de la Guardia Civil el General Barreto fue relevado del puesto
por su valentía y desinterés pero se gano la admiración de todos los que lo conocían.
Como esos, encontramos muchos acontecimientos
a veces como espectadores y a veces como protagonista que fueron paso a paso delineando el perfil de
la Institución. Esta mirada retrospectiva nos permite
señalar algunos hechos que cambiaron la historia.
La expedición de las leyes orgánicas de la GC-PIP y
GR con un tinte claramente discriminatorio por parte
las F.F.A.A. durante el gobierno del General Juan Velasco Alvarado, y que como no podía ser de otra manera,
al poco tiempo solo fue un mal recuerdo.
Revista Guardia Civil