Una opción es el cultivo sustentable. Desarrollar junto con los
agricultores nuevas técnicas para producir comida sin agravar los
costos al medio ambiente es una opción. En sí misma, producir
menos carne ayudaría a reducir el impacto ambiental (al utilizar el
grano para consumo del ganado en otras formas de alimentación
humana, así como invertir con mejor eficiencia el agua y la tierra
destinadas a su manutención): hoy en día producir un kilo de carne
cuesta en promedio unos 10 kg de alimento y 15,000 litros de agua.
En un nivel doméstico la batalla también está puesta. A
continuación ponemos algunas formas en que puedes contribuir a
reducir el problema de la alimentación mediante la implementación
de la agricultura doméstica: