La voz del Fray 2.0, 3 (06/2017) vozfray-3-2017 | Page 41
CULTURA
BIOLOGÍA EN CASA
Además de
garbanzo o
Hacer
una
germinar
lenteja
en
un
un
recipiente con algodón y agua, hay
otras maneras de practicar la biología
en casa. Para ello, no hace falta
recurrir a utensilios complejos ni tener
mucho conocimiento en la materia, ya
que con materiales que tengamos por casa y otros que podamos conseguir yendo al campo o incluso a tu jardín, podremos
realizar experimentos propios de la biología.
En este caso, os explicaré cómo hacer un terrario independiente con plantas e insectos, el cual no tendrás que cuidar ni lo
más mínimo. Para ello necesitaremos: una pecera o recipiente con la tapa sellada, tierra, carbón vegetal ( de barbacoa ) ,
plantas silvestres que te puedas encontrar en la naturaleza, insectos como hormigas, mariquitas o escarabajos, adornos tales
como piedras, cortezas de árboles, ramas o incluso troncos, agua y hojas para alimentar a nuestros insectos, además de las
propias plantas que le servirán como tal. Con todo esto, ya podremos empezar a formar nuestro terrario.
En primer lugar, en la pecera ( previamente limpiada ) , colocaremos 2cms de tierra en el fondo, y encima de ésta, una capa
de carbón vegetal ( para que no se pongan en mal estado las plantas ) . En segundo lugar colocaremos otra capa de tierra
hasta llenar la mitad de la pecera. A continuación, nos dispondremos a colocar las plantas y adornos en la superficie de la
última capa, cavando hoyos para introducir las plantas. Después, rociaremos la pecera con abundante agua, evitando que se
creen “ charcos ” de agua en la tierra. Y para finalizar, pondremos los insectos dentro de él y lo cerraremos para que no se
salgan y no entre nada de aire.
Una vez el terrario ha sido creado, lo colocaremos en algún lugar de casa donde reciba mucha luz solar. Así, la planta podrá
realizar la fotosíntesis y podremos mantener nuestro miniecosistema con el oxígeno obtenido de éste. El agua se calentará, se
evaporará y se condensará en la cubierta, y por la noche, volverá a caer en forma de gotas simulando la lluvia. Así, volverá a
utilizarse para alimentar a las plantas de nuevo. Es recomendable que cada dos o tres meses se riegue, pero estas veces en
menor cantidad.
Como verás, podremos observar cómo se comportan los animales en un hábitat natural y disfrutar de la biología a un nivel
más avanzado.
Manuel Muñoz Luchena, 1º Bachillerato A
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