La Revista Digital 1 Versión Final Revista No. 2 - Prueva | Page 12

B. Morales y A. Santiago como en profundidad. Estos levantamientos geofísicos se complementaron con perforaciones rotativas en la morrena y la lengua glaciar, habiendo comprobado que la geofísica y las perforaciones verificaron la concordancia de ambos métodos sólo con algunos metros de diferencia. Por primera vez en Latinoamérica, se efectuaron perforaciones rotativas sobre un glaciar, llegándose a encontrar un espesor de 155 m de hielo. Con el monitoreo constante de este glaciar y de otros glaciares piloto, se pudo constatar la acción de los cambios climáticos, pues la laguna Safuna de 400 m de largo en 1966, se transformó en una laguna de 1700 m de largo en menos de 20 años, con una profundidad del orden de 150 m. Estos resultados y las condiciones de riesgos detectadas llevaron a la Corporación Peruana del Santa a construir un túnel de desagüe de 140 m de largo a través del dique morrénico. Por otro lado, se inició un monitoreo glaciar con perforaciones térmicas a lo largo y ancho del glaciar para determinar el balance de masa, encontrándose que el balance era negativo, es decir, que se derrite el glaciar mucho más en equivalente en agua que la reposición de nieve en la zona de acumulación. La Reducción de las Superficies Glaciares por Efecto del Cambio Climático En el año 1970, se inicia el inventario de los glaciares de la Cordillera Blanca, empleando como referencias iniciales las fotografías aéreas de los años 1962-1965, con el fin de conocer las superficies de los glaciares y sus variaciones por efecto de la influencia del cambio climático. Se han elaborado cuatro inventarios: el primero, por la Corporación Peruana del Santa, Electroperú e Hidrandina; el segundo, por el Consejo Nacional del Ambiente (CONAM); el tercero, por la Autoridad Nacional del Agua (ANA); y el cuarto, por el Instituto Nacional de Investigación en Glaciares y Ecosistemas de Montaña (INAIGEM) al 2016. La información obtenida aseveró la magnitud de la fusión de los glaciares en esta Unidad Norte, encontrándose que, entre 1966 y 2016, la superficie glaciar perdió 34.16 km 2 , lo que compromete el aprovisionamiento hídrico para fines energéticos y agrícolas, principalmente (ver Figuras 1 y 2). La Formación de Lagunas por Efecto del Cambio Climático Los mejores indicadores de los cambios climáticos son los glaciares, debido que son susceptibles a pequeñas variaciones de temperatura, lo cual se evidencia por la reducción de las superficies glaciares. Estos efectos se pueden distinguir especialmente en lenguas glaciares que, debido a la temperatura, se fusionan y van formando progresivamente lagunas glaciares encerradas por diques morrénicos o de roca. Buenos ejemplos de esta formación se tienen en las lagunas Safuna, Pucacocha y otras en la quebrada Quitaracsa, las lagunas Jancarurish y Cullicocha, en la quebrada Los Cedros, y las lagunas Taullicocha, Arhuaycocha y Yuraccocha en la quebrada Santa Cruz. Estas lagunas han crecido rápidamente por la fusión Figura 1. Cobertura glaciar (1962-1965) de la Unidad Norte de la Cordillera Blanca. 10 Revista de Glaciares y Ecosistemas de Montaña 2 (2017): 9-12