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#NO TE OLVIDES DE SER FELIZ!!! MITOS Y VERDADES El Collar le hace mal a mi perro? E n el tiempo que llevo trabajando con perros, he notado que las personas se aferran a mitos que muchas veces no son ciertos. Hoy podría decirse que es tendencia pasear a los perros con pretal o pechera, a lo que vemos muchos humanos siendo arrastrados por sus perros, sin necesidad que sean de una raza de gran porte, el solo hecho que el animal posea el accesorio equivocado lleva a que pierdas el control, te frustres y decidas no sacarlo más. Alguien dijo que el collar lo ahorca y le hace mal a la garganta, lo cual podría llegar a ser cierto en el caso que el perro tenga algún problema en esa parte de su cuerpo, según mis experiencias siempre he utilizado correa y collar, inclusive confeccionamos un accesorio que lo llamamos Correa “Primer Paso” que se ajusta en la posición correcta para tomar el control al 100% de la mordida, la cabeza de tu perro, llevando un accesorio que sujete su pecho solamente tendremos acceso al cuerpo, no a su cabeza, la que le da la dirección de hacia donde ir. La Pechera o Pretal fueron confeccionadas para animales de tiro, jalar de un trineo, para perros de razas especificas que son criados para ese trabajo, el cual con este accesorio el perro hace fuerza con la parte mas fuerte de su cuerpo, pecho y patas, traído esto a nuestros perros de diferentes razas el objetivo del accesorio no se pierde, tirar. Es notable ver como el cuerpo del perro se inclina levemente hacia adelante cuando le colocamos el pretal y comienza la tención en la correa, lo que es totalmente contraproducente para lograr tener un paseo de manera correcta y armoniosa. Siempre trato de explicar como está confeccionado el cuello del perro: Parte Baja (Es hacia donde caen los collares mal ajustados y se acercan al pecho donde tendremos tironeos) Parte Media (Es el interpas entre las dos zonas importantes a tener en cuenta) Parte Alta (Se posiciona bien por detrás de las orejas y donde termina la mandíbula, si colocamos allí el collar ajustado, con dos dedos de distancia entre el collar y el cuello del perro, podremos tomar el control de manera efectiva, pudiendo direccionar de manera correcta su paso. Un claro ejemplo son los perros de exposición) LA REVISTA DE EQUILIBRIO CANINO / JULIO 2018 / 18