LA GACETA DEL ENRIQUETA Nº 14 Diciembre 2022 | Page 24

Microrrelatos

Ciencia y científicos

La señora Coli

Érase una vez un hombre llamado Ricardo , de 36 años ( y medio ), de una estatura media , no pasaba el 1,79 , y es que sí , Ricardo no era ninguna persona diferente al resto , no tenía ninguna habilidad especial ni nada que le hiciese destacar sobre el resto , y , aunque lo parezca , Ricardo no va a ser el protagonista de esta historia . Ricardo trabajaba en una central eléctrica , no trabajaba demasiado , ni cobraba muy poco . Un día , su jefe no se levantó con buen pie , y le hizo trabajar unas horas extra , Ricardo llegó a casa a las 15:53 , estaba pasando un hambre inaguantable . Abrió con desesperación la nevera , y vio un filete de ternera con una pinta increíble , así que no dudó ni un segundo y lo puso en la sartén . Mientras lo cocinaba , perdido en su mente se acordó , a las 16:45 tenía que estar en casa de Paco para luego pasar juntos a recoger a Laura e irse a ver el partido del Real Madrid , en ese momento , su mente colapsó , pensó que no tenía tiempo y sacó el filete antes de lo debido . Lo que Ricardo no sabía es que en ese aparentemente inofensivo trozo de filete a medio cocinar , tenía presente una pequeña Escherichia Coli , la protagonista de esta historia . Esta bacteria , a pesar de parecer una simple bacteria , era mucho más , se llamaba Lucía , y tenía una vida muy tranquila en el interior del filete de ternera , cuando Ricardo “ cocinó ” el filete , la mayoría de sus amigas murieron , ella en cambio logró sobrevivir , cuando llegó el intestino , seguía un tanto aturdida por el calor que pasó hace unas horas en la sartén , pero no tardó ni un minuto en darse cuenta de que sus amigas no estaban con ella , se sentía desubicada , no sabía dónde estaba , solo veía un montón de vellosidades por todos lados , estaba enfadada , y decidió vengarse de Ricardo , se adhirió a la pared intestinal y comenzó con su venganza , le empezó a provocar dolores de tripa a Ricardo mientras dejaban a Laura en su casa , y al no poder aguantarse las ganas , subió corriendo las escaleras con ella y le dejo el baño hecho una pocilga , olía peor que el azufre , Dios mío , no os recomiendo entrar en ese baño . Lucía siguió adelante con su plan , pero , tras apenas una semana peleando , empezó a sentirse muy cansada y , sus últimas palabras fueron : “ tuviste suerte esta vez , pero volveremos más fuertes ”. Y así Ricardo aprendió lo malas que son las prisas .
Diego Martín , 2 º A Bachillerato
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