JUDÍOS DECLARAN LA GUERRA A ALEMANIA JUDÍOS DECLARAN LA GUERRA CONTRA ALEMANIA | Page 67

de guerra de hallaba – y sigue hallándose – bajo el casi absoluto control de judíos. Concretamente, en los Estados Unidos, el hombre que en las dos últimas guerras mundiales ha centralizado en sus manos el más omnímodo poder sobre las industrias bélicas fue el llamado “Procónsul de Judá en América”, Bernard Mannes Baruch, según se reconoció, incluso, en una histórica sesión ante el Senado norteamericano 95 . ¿Puede aún haber dudas que la Segunda Guerra Mundial fue un negocio judío? Un tercer factor fue el comunismo, y concretamente su encarnación fáctica, es decir, la Unión Soviética quien resultaría, a la postre, el verdadero vencedor político de la contienda. Y no se puede discutir seriamente que, si en la gestación de la URSS intervinieron mayoritariamente los hebreos de los ghettos rusos y polacos. En 1939 elementos judíos copaban en una proporción no inferior a las dos terceras partes el “apparat” gubernativo de la URSS. Y que Alemania era consciente de quién era su verdadero enemigo lo demuestran numerosas declaraciones públicas de sus principales líderes políticos, de las que vamos a citar, como más representativa, una frase del discurso de Hitler del 19 de Septiembre de 1939: ―En numerosas ocasiones, he ofrecido la amistad del pueblo alemán a Inglaterra y al pueblo inglés. Toda mi política se ha basado en la idea de esa mutua amistad. Siempre he sido rechazado... Nosotros sabemos que el pueblo inglés, en su conjunto, no puede ser hecho responsable. Quien en realidad odia a nuestro Reich es la clase dirigente y plutocrática de la Judería‖ 86 . Que no se trataba de fantasías de Hitler lo certifican dos testigos de impar calidad. Nada menos que los embajadores polacos en París y Washington en el momento de estallar la guerra. Lukasiewicz, embajador en París, escribió a su Gobierno, el 7 de Febrero de 1939, que el Embajador norteamericano en Paris, el medio judío William C. Bullit, le había dicho textualmente que ―… los Estados Unidos disponen de medios de presión formidables contra Inglaterra. 86 BOCHACA, Joaquín, El Mito de los seis millones Ob. Cit. p. 39 67