JUDÍOS DECLARAN LA GUERRA A ALEMANIA JUDÍOS DECLARAN LA GUERRA CONTRA ALEMANIA | Page 239

" podrido " y esto de manera irremediable. Él escribe: "¿ Se puede enderezar el entuerto?" Y responde: " Es demasiado tarde ". Añade: " La forma actual, sin embargo triunfante, de la presentación del universo de los campos está condenada ". Termina juzgando que todo lo que se ha inventado así alrededor de demasiados reales sufrimientos, está prometido " a los cubos de basura de la historia ". En 1993-1994, Igounet, había sido celebrado en el mundo entero como un extraordinario buscador. Aquí, en este libro se presencia a Valiere Igounet, firmar su capitulación 326. La opinión pública mundial es una verdadera rehén de la prensa mundial y como tal sumida en la ignorancia de un hecho tan trascendental: el hombre de excepcionales cualidades que entre 1993- 1994 los medios de comunicación mundial le habían exhibido como un portentoso buscador; que al fin había encontrado la prueba irrefutablemente científica de la existencia de las cámaras de gas nazis. 16 a 17 años más tarde este mismo hombre prodigio, acabó por admitir su equivocación. Ningún medio de comunicación informó el reconocimiento de su error. Menos comunicó su muerte algunos años más tarde.
19. David Irving, perdió el proceso por difamación contra la judía americana Deborah Lipstadt, por sostener la tesis según la cual no existieron cámaras de gas homicidas en Auschwitz. Si el juez Charles Gray, luego otros jueces, hubieran tenido más valor, este punto habría debido permitirle ganar su causa. El argumento: la afirmación que, para matar a los detenidos judíos en un local, un SS, desplazándose sobre el techo
de hormigón de la supuesta cámara de gas, vertía gránulos de Zyklon B por cuatro orificios regulares situados en el techado. Sin embargo es ampliamente comprobado – por la fotografías de los aviones aliados que volaban sobre la supuesta cámara de gas- que tales orificios no han existido jamás. Entonces: El crimen, pues, no ha podido cometerse.
326 FAURISSON Robert, Las victorias del revisionismo … Ob. Cit. p. 30 239