JUDÍOS DECLARAN LA GUERRA A ALEMANIA JUDÍOS DECLARAN LA GUERRA CONTRA ALEMANIA | Page 139

Volviendo a los atentados, la "oposición democrática" a Menen, conocida como "sinagoga democrática", también cumple celestinamente con el rol asignado. En un informe redactado por esa "sinagoga democrática" en relación con los atentados terroristas judíos, destaca las críticas a la Suprema Corte de Justicia, quien fue la única institución en emitir un sólido informe técnico donde se señala que lo de la Embajada, no fue una "explosión" sino una "implosión". La judaizante “oposición democrática" acusa a la Corte Suprema de Justicia de haber elaborado el aludido Informe, cuyos estudios técnicos fueron – como ya de dijo - delegados a la Academia Nacional de Ingeniería, con el objeto de "producir el fracaso de la investigación". Tantas acusaciones filo judías, es como que los científicos utilizaron, en este caso, una física y unas matemáticas antisemitas. O, Argentina ha ―dejado de pensarse a sí misma como comunidad de destinos. Tal vez ya se acepte como país inviable, intervenible y digerible‖. Finalmente, afirmar, que la comunidad judía residente en la Argentina se ha erigido en un poder dentro del poder, es expresar una verdad a medias. Porque, La Argentina está absolutamente rendida a un proceso de sustitución de la realidad. Lo que los judíos erigen a priori es una metafísica de la historia. Un Espíritu Absoluto que prescribe con total iniquidad y sin las fronteras dadas por el tiempo, qué es la verdad y quién falsea la verdad, de esta categoría llamada "realidad". Friedrich Nietzsche en el siglo XIX argumentaba: ―Los judíos,…puestos en el dilema de ser o no ser, prefirieron, con una determinación francamente escalofriante, ser a cualquier precio; este precio era el falseamiento radical de toda la Naturaleza…, de toda realidad, (…) Invirtieron la religión, el culto, la moral, la historia y la sicología, de un modo fatal… Los judíos son, así, el pueblo más fatal de la historia; como resultado de su gravitación, la humanidad se ha vuelto tan falsa que, todavía hoy, el cristianismo es capaz de sentirse antijudío, sin tener conciencia de que es la idiosincrasia judía llevada a su consecuencia última. (…) este tipo humano está vitalmente interesado en 139